Así lo explicaron a Servimedia fuentes del sector, que defendieron que dicha compensación, que deberán asumir los consumidores, será mucho menor que la rebaja que se lograría en el precio de la electricidad.

De hecho, consideran que dicha compensación se podría aplicar de forma simultánea a la medida, con lo que no se giraría ningún tipo de déficit de tarifa, aunque admiten que también se podría dejar dicha compensación para el futuro.

Por otro lado, estas fuentes advirtieron, ante la tentación que podría tener el Gobierno de aplicar esta medida sin esperar a Bruselas, que “la única manera de que esto funcione razonablemente es que se haga en toda Europa”, aunque admitieron que lo podría hacer de forma individual.

A este respecto, señalaron que si la limitación del precio del gas se aplicara solo en el mercado español se produciría un efecto indeseable, ya que los consumidores españoles acabarían subvencionando el gas que se exportara a otros países.

Además, indicaron que debe decidirse si se aplica solo al gas que se destina a la producción de electricidad o se hace con todo el gas natural, lo que podría tener más sentido según el sector eléctrico.

En todo caso, destacaron que el visto bueno de la comisión europea a llevar a cabo esta medida supone un “giro de 180 grados” por lo que valoraron que España lo haya conseguido puesto que “era impensable” hace un mes.

De hecho, valoraron que la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, haya conseguido este cambio en Bruselas, cuando, según revelaron, había gente en la Comisión que “se reía de ella” cuando planeaba topar el precio del gas.