Para el PSOE, los colegios en obras son insuficientes, dada la antigüedad, argumenta, de la mayoría de los centros, que hace que muchos de ellos necesiten obras de rehabilitación y no "meros lavados de cara".

Además, la concejala socialista responsable de temas educativos, Ana de Sande, advirtió de que "si estas obras no se terminan el 15 de septiembre, miles de alumnos tendrán que empezar el curso entre escombros o ser trasladados a barracones u otros centros escolares próximos, como lamentablemente viene ocurriendo todos los años".

Por ello, pidió al Ayuntamiento que ponga en marcha "un programa de inspección de obras que controle la rapidez en su ejecución e inste a las empresas contratistas a acelerarlas al máximo", y que se sancione económicamente a las empresas que se retrasen en la terminación de las obras de los colegios sin causa justificada.

La edil socialista considera "intolerable" que las obras de acondicionamiento y reforma de los colegios se prolonguen innecesariamente hasta el mes de noviembre o diciembre, porque "estos retrasos provocan un grave trastorno para los alumnos y profesores de los centros que tienen que empezar las clases en unas condiciones penosas, en medio de ruidos y polvo".

De Sande, que considera "injustra y discriminatoria" la selección por distritos que ha hecho el Ayuntamiento de los colegios que necesitan obras, denunció también que el 70% de los colegios públicos de la capital no cumplen con los requisitos mínimos de seguridad establecidos por la legislación.

Por ello, exigió que se dé preferencia en el futuro a las obras para aumentar la seguridad y reducir los accidentes en los colegios, como son las de reparación de las instalaciones eléctricas, fijación de canastas y porterías en los patios, reposición de azulejos y pavimentos con riesgo de desprendimiento y obras de supresión de barreras arquitectónicas, según informó el Grupo Socialista.