Ayuso manifestó que la citada ley, que hoy recibió luz verde por parte del Consejo de Ministros, supone “destrozar el anterior sistema educativo" y opinó que se ha elaborado “sin consenso” y de manera “autoritaria”. Además, indicó que el nuevo modelo educativo que propone el Gobierno central “no mantiene compromisos con la calidad o el mérito”.

Señaló, asimismo, que se ataca a la educación concertada y destacó que sin ella “la educación no hubiera llegado a lo que es hoy”. “Lo han hecho sin dialogo y con arrogancia” porque quieren cambiar la educación “por la puerta de atrás”, según Ayuso, quien consideró que “invade competencias autonómicas”.

La presidenta de la Comunidad de Madrid declaro que esta reforma educativa ataca el derecho a conocer la lengua castellana y la libertad religiosa, y consiente que se pase de curso con suspensos, lo que supone “igualar a la baja”.

Aseguró que, recurriendo al Tribunal Constitucional defiende la educación pública y la concertada, a la que asisten 370.000 alumnos, y dijo que “no nos vamos a quedar callados” desde la Comunidad de Madrid.

Ayuso añadió que también se ataca el derecho de los padres a que sus hijos reciban educación atendiendo a sus convicciones religiosas. “Este ataque no quedará silenciado”, concluyó.