Rodríguez Zapatero participó hoy en el acto de presentación de una campaña organizada por el Consejo General de la Abogacía para defender el respaldo a la Constitución en el referéndum del próximo domingo.

Cuando se cumplen sesenta años de la liberación de campos de exterminio en territorio europeo como Auschwitz o Mathausen, Rodríguez Zapatero recordó que una generación de españoles y europeos ha podido crecer en paz y en democracia, sin conocer los sufrimientos de una guerra.

El mejor legado que esa generación puede dejar para el futuro es, en su opinión, ese mismo "privilegio", el de no conocer el enfrentamiento entre semejantes. Una Europa fuerte y unida, y una España integrada en ella, es una fórmula inmejorable, añadió.

Recordó el presidente que Ortega y Gasset hablaba hace cien años de la regeneración como un deseo y del europeísmo como modo de satisfacerlo, y se refería por ello a España como un problema y a Europa como la solución.

Hoy, España ya no es un problema, sino que, muy al contrario, puede formar parte de la solución. Se está ante la oportunidad de contribuir de forma destacada a la construcción de la unidad política europea.

Rodríguez Zapatero, en su doble condición de político y abogado, aseguró que ambas disciplinas, Política y Derecho, "se conocen y se respetan".

Subrayó que para los abogados se abre ahora el reto de conocer los ordenamientos jurídicos de España y también de la Unión Europea, y esbozó por ello un argumento adicional en favor de la regulación de los accesos a la profesión, cuyo estudio, precisó, tiene ya muy avanzado el Ministerio de Justicia.

El presidente elogió la labor de los abogados y les recordó que para ellos, como para los políticos, "merece la pena no rendirse cuando estamos hablando de la defensa de los derechos de nuestros semejantes".