En un comunicado, la organización ecologista lamentó que el mismo día en el que se celebra el nacimiento de dos nuevos cachorros de esta especie en serio peligro de extinción, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía dé a conocer el hallazgo del lince atropellado.

Con esta muerte, denuncian, son ya ocho los ejemplares muertos en el entorno de Doñana desde el inicio de 2005 hasta la fecha, de los cuales cuatro han muerto por atropello. Además, desde el año 2000, 16 linces han sido atropellados, con una media de 2,5 ejemplares por año.

Estos datos indican, según Adena, que las carreteras que atraviesan este espacio natural constituyen la mayor causa conocida de mortalidad para el lince y un claro factor de extinción de la especie.

A pesar de ello, la Junta de Andalucía no ha podido frenar esta "sangría" y ha mantenido una actitud ambigua ante las demandas de los grupos ecologistas, denuncian en el comunicado. Tampoco ha sido capaz de zanjar de raiz la discusión sobre nuevos proyectos, como la carretera norte de Doñana (Cádiz-Huelva), el desdoble de la carretera Mazagón-Matalascañas o el de la carretera Almonte-Matalascañas.

Luis Suárez, responsable del programa de especies de la organización, señaló que "es inaceptable que en uno de los espacios naturales protegidos más representativos de Europa se prime la construcción de infraestructuras sobre la conservación del patrimonio natural".

"Las personas que quieran atravesar ese lugar se deben de adaptar a las necesidades de la fauna y no pretender lo contrario y la Junta de Andalucía debe poner todos los medios para que esto se cumpla de una forma efectiva", concluyó.

Por ello, WWF/Adena exige la inmediata puesta en marcha de un plan de emergencia para el lince en Doñana que contemple la construcción de un mayor número de medidas correctoras en todas las carreteras de la zona, con especial atención a aquéllas que obliguen, de una forma eficaz, a reducir la velocidad de los vehículos que transitan por ellas.