La producción socialista, titulada "La otra tregua. Cómo actuó el PP cuando estaba en el Gobierno", comienza con una imagen del comunicado de ETA en el que anunciaba la tregua de 1998, a la que le sigue unas declaraciones de José María Aznar en las que autoriza a mantener "contactos" con la organización terrorista.

A lo largo del vídeo aparecen numerosos testimonios de aquel gobierno, especialmente del presidente, José María Aznar; del ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy; del ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja; del portavoz del Gobierno; Josep Piqué, y del primer secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez.

Rodríguez, que abandonó el Ejecutivo de Aznar meses antes del alto el fuego de ETA, aparece hasta en tres ocasiones en el vídeo con unas mismas declaraciones fechadas el 28 de noviembre de 1997: "No debe haber vencedores ni vencidos".

El presidente de Navarra, Miguel Sanz, es otro de los protagonistas del vídeo socialista con unas manifestaciones en las que defiende la concesión de beneficios penitenciarios para los presos de ETA una vez que el terrorismo desaparezca y en las que asegura que su comunidad autónoma "sabrá ser generosa".

El vídeo del PSOE recuerda que la tregua de ETA se produjo apenas un año después del asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco y destaca que, tanto antes como después de aquel crimen, el Gobierno de Aznar llevó a cabo decenas de acercamientos de presos.

Acusa a Aznar de hacer "guiños dirigidos a los terroristas" para favorecer el diálogo, incluso "entre asesinato y asesinato" de las nueve personas a las que ETA mató antes del alto el fuego.

Antes del cese de la violencia y tras el asesinato en Sevilla del concejal del PP Alberto Jiménez Becerril, el vídeo reproduce las siguientes declaraciones de Aznar al diario "El Mundo": "Estoy dispuesto a ser generoso, a ser comprensivo si eso ayuda al final del terrorismo, eso es lo que tiene que entender todo el mundo, no es un camino sencillo".

El PSOE destaca que "pese al gesto" del Gobierno de Aznar, ETA prosiguió con sus atentados antes de cerrar el Pacto de Estella con el resto de los partidos nacionalistas del País Vasco.

El vídeo admite que el Ejecutivo del PP recibió "con cautela" a tregua de los terroristas pero resalta que, inmediatamente, autorizó el traslado de cuatro presos de la banda a cárceles del País Vasco y concedió el tercer grado a otro recluso.

Según la voz en off que narra el reportaje elaborado por el PSOE y difundido a través de "www.psoetv.es", Aznar prometió "más medidas de gracia" a los terroristas a cambio de poner fin a la violencia y realizó "numerosas concesiones" para favorecer el diálogo.

Incluso, recuerda que en una entrevista a "El País", señala que Aznar no veía necesario que ETA pidiera perdón: "No estoy pidiendo, y podría hacerlo, que asuman todos los pronunciamientos electorales que ha habido en estos 20 años, ni siquiera que hagan explícita condena de sus propios crímenes pero sí que acepten las reglas democráticas desde el momento en que anunciaron el cese de la violencia".

El vídeo del PSOE hace hincapié en que, antes de los primeros contactos con el entorno de la banda, Aznar "deja de considerar a ETA un grupo terrorista" para referirse a la banda como "Movimiento Nacional de Liberación Vasco".

A partir de ese momento, añade, Aznar acerca al País Vasco a más de 130 presos, deja en libertad a terroristas y permite que vuelvan a España miembros de ETA que estaban escondidos en países extranjeros.

Es entonces cuando se pone en marcha una "filosofía" que consiste en repetir "una y otra vez" las palabras "perdón y generosidad" como gesto de buena voluntad a los terroristas y como aprobar dos mociones en el Congreso para dar una "nueva orientación" a la política penitenciaria.

Sin embargo, el PSOE pone de manifiesto que ETA siguió extorsionando "durante toda la tregua" a empresarios, continuó con la violencia callejera e incluso robó en Francia ocho toneladas de explosivos y 5.000 detonadores. Pese a todo, dice, "el Gobierno no paraliza el proceso" y la oposición del PSOE "no cuestiona" los pasos de Aznar.

La actitud de los medios de comunicación tiene dos menciones especiales en el vídeo de los socialistas, quienes aseguran que la prensa mostró "discreción" durante toda la tregua y se comportó con "lealtad" hacia Aznar hasta el punto de elogiar su "valentía política".

De hecho, cuando se rompe la tregua en noviembre de 1999, el PSOE destaca que, a diferencia de ahora, nadie le reprocha a Aznar que llamase MNLV a ETA o que mantuviera una reunión en Burgos con los dirigentes de Batasuna o con la cúpula de la banda en Suiza.