Por ello, lamentó que “caigan en el olvido las medidas y reformas que afectan directamente al trabajo autónomo” con medidas “que son una urgencia y prioridad”, como el cese de actividad o el subsidio para mayores de 52 años.

Así, esta organización criticó que, actualmente, en España, miles de personas trabajadoras por cuenta propia que, por diversas razones, deben cesar su actividad económica y agotan la prestación por cese de actividad, quedan “totalmente desamparados y ajenos al paraguas de la protección social, sin ningún tipo de ayuda para subsistir”, lo que es una situación “totalmente insostenible”.

Por ello, el presidente de UPTA reclamó que se vuelvan a poner encima de la mesa todas aquellas cuestiones que se refieren a la protección social de las personas trabajadoras por cuenta propia. “Esta es una decepción más para los autónomos, puesto que la ansiada reforma del cese de actividad, que ya hace meses que ha iniciado sus trámites, se encuentra en estos momentos en una vía muerta. Además, no entendemos por qué razón se excluye a los trabajadores por cuenta propia para que puedan acceder al subsidio para mayores de 52 años cuando sus negocios han cerrado por causas ajenas a su voluntad””, añadió.

En este punto, recordó que, desde UPTA ya han hecho una propuesta para que el subsidio para mayores de 52 años se haga a través de una prestación extraordinaria, a la que “los autónomos están dispuestos a contribuir a través de las cotizaciones a la Seguridad Social”.

“Ni Gobierno ni oposición hacen los deberes con nuestro colectivo; unos desoyen la petición de nuestra organización y otros sencillamente están inmersos en una lucha política partidista que no ayuda a resolver los problemas de las personas trabajadoras autónomas”, zanjó Abad.

Pese a esta carencia, UPTA sí valoró positivamente el contenido del decreto en lo que se refiere a los asalariados. “La reforma hoy aprobada está encaminada para alcanzar el pleno empleo, mejorando las condiciones de contratación y asegurando que las personas mayores de 52 años, los más perjudicados por el paro de larga duración, tengan asegurada su protección social”, concluyó.