Este reconocimiento significa que Unión Fenosa va más allá de la normativa habitual y se compromete a mantener un programa de mejoras medioambientales continuadas en todas sus cenrales, además de someterse a auditorías externas cada año.

Con el fin de implantar un sistema de gestión medioambiental en sus centrales, la compañía inició el proceso en 1997 en la central térmica de Meirama (Galicia), instalación que sirvió de referencia y que fue la primera de carbón nacional que obtuvo la certificación en España. Ahora la empresa ha culminado el proyecto con la certificación de la central térmica de Narcea (Asturias).

El proceso que se ha llevado a cabo en las diferentes centales situadas en Galicia, Castilla-León, Castilla-La Mancha y Madrid, ha constado de una revisión medioambiental, con atención a los requisitos legislativos y reglamentarios y a la identificación y evaluación de los aspectos medioambientales.

Además, el proceso ha incluido prácticas y procedimientos de gestión medioambiental en áreas de atmósfera, agua, residuos, ruido y consumo de materias primas.

El resultado es definir una política medioambiental específica para la central y un programa de gesión que recoja los proyectos a realizar en las instalaciones. El plan de actuaciones se ejecuta a través de un manual de gestión integrado que refleja las actividades y proporciona una descripción de la estructura organizativa, de los recursos, procedimientos y procesos necesarios para el establecimiento del sistema.

La última fase es la de la implantación misma en la que se realiza formación del personal en referencia a la propia implantación y en la aplicación de los procedimientos a seguir por las entrales.