En un comunicado, UGT insistió, ante los datos de aumento del paro y bajada de la ocupación, en no dejar de aplicar políticas expansivas que favorezcan la actividad y la creación de empleo.

El sindicato consideró que los datos “deben ser tomados con cautela, en tanto que pueden mostrar distorsiones aparejadas al propio efecto de la entrada en vigor de la reforma laboral, que habría disparado la contratación meses antes, no registrándose en estos momentos las cifras a las que se podría haber llegado en un año considerado normal”.

UGT valoró que “es de apreciar” que a los siete meses de vigencia de la reforma laboral, el contrato indefinido es “la modalidad de referencia para la contratación, en detrimento de los contratos temporales”.

En todo caso, a juicio del sindicato, los datos del mercado laboral de julio muestran la necesidad de garantizar la capacidad adquisitiva de las familias y limitar “los grandes beneficios extraordinarios acumulados por las grandes empresas, especialmente aquellas energéticas que se aprovechan de la actual situación”.