Así lo manifestó a Servimedia la secretaria de Políticas Europeas de UGT, Mari Carmen Barrera, quien acompañó esta semana a una delegación de RUGE, la asociación juvenil del sindicato, en una visita institucional al Parlamento Europeo y al Comité Económico y Social Europeo (CESE), donde pudieron plantear sus reivindicaciones en materia de juventud y mercado laboral a las diferentes formaciones políticas.

Según Barrera, la receptividad de los partidos fue “muy positiva”, lo que consideró que es “muy relevante”, ya que el próximo año se celebran elecciones europeas y, por tanto, es momento de “arrancar compromisos” a los líderes políticos para que “luego podamos ver que se materializan o, en su defecto, exigir que así se haga”.

La representante sindical recordó que 2022 fue el Año Europeo de la Juventud, aunque es este año cuando se están desplegando iniciativas, sobre todo encaminadas a la formación que, eso sí, “debe estar más orientada al empleo”. Al hilo, reclamó más orientación para la juventud y más políticas activas de empleo, especialmente para los jóvenes “con más dificultades de inserción”.

“Y es que todo no se soluciona con la formación. Necesitamos más políticas activas”, insistió Barrera, para pedir más financiación para este tipo de políticas. En este punto, hizo alusión al SURE, que es un instrumento de respuesta a situaciones de crisis que durante la pandemia se dotó de miles de millones de euros como apoyo a los Estados miembro por la subida del paro a consecuencia de la crisis sanitaria y que permitió paliar el impacto en las cuentas públicas de medidas como los ‘ERTE covid’.

“Desde entonces estamos reivindicando que el SURE siga muy activo, pero ahora para impulsar políticas potentes de formación, orientación y apoyo al acceso al empleo de colectivos como los jóvenes, aunque sabemos que la guerra que sufre Ucrania ha tenido que absorber presupuestos públicos”, ahondó Barrera.

Finalmente, equiparó esta situación con el hecho de que haya una directiva europea sobre salario mínimo interprofesional (SMI). “Pues necesitamos más coordinación en políticas activas y en formación”, zanjó Barrera.