El Tesoro se había marcado el objetivo de obtener entre 750 millones y 7.250 millones en esta subasta. La demanda de los inversores se situó en 10.780,94 millones.

En concreto, ofertó Obligaciones indexadas a la inflación a 15 años de nueva emisión, con cupón del 2,05% y fecha de vencimiento del 30 de noviembre de 2039, en las que consiguió 516,13 millones a un interés marginal del 1,53%, por encima del 1,065% que se obtuvo en la subasta del 13 de abril de 2023.

También puso en el mercado Obligaciones a 10 años con vida residual de 5 años y 3 meses, con un cupón del 1,45% y que vencerán el 30 de abril de 2029. Obtuvo 1.751,07 millones a un interés del 2,698%, muy por encima del 0,945% que marcó la última subasta del 9 de mayo de 2019.

Asimismo, colocó Obligaciones a 10 años con vida residual de 7 años y 3 meses por 1.774,94 millones de euros a un interés del 2,88%, por encima del 2,669% que se marcó en la última subasta del 1 de diciembre de 2022. Se ofertaron con un cupón del 0,10% y vencerán el 30 de abril de 2031.

Por último, subastó Obligaciones a 10 años de nueva creación, con un cupón del 3,25% y vencimiento el 30 de abril de 2034. El organismo logró 2.527,46 millones de euros a un interés del 3,173%, algo por debajo de la última subasta de Obligaciones a 10 años, del 16 de noviembre de 2023, con cupón del 3,55% y vencimiento el 31 de octubre de 2033, cuando la referencia fue del 3,616%.

Tras esta operación, el Tesoro celebrará en el mes de febrero otras tres subastas. El martes 6 de febrero tendrá lugar la segunda del mes, en la que ofertará Letras a 6 y 12 meses. El 13 de febrero, justo una semana después, será el turno de las Letras a 3 y 9 meses, mientras que el jueves 15 será la última, con subasta de Bonos y Obligaciones.

La estrategia del Tesoro para este año prevé una emisión de deuda neta de 55.000 millones de euros, 10.000 millones menos que la cifra de 2023.