La esperanza de vida ha disminuido en países como Letonia (61 años frente a 66 en 1980) o Estonia (66 frente a 7). En ello ha influido el espectacular aumento de la tasa de suicidios, que en Rusia es de 66 hombres y 13 mujeres por 100.000 habitantes (más del 60% respecto a 1989), y en Lituania de 74 hombres y 14 mujeres (subida del 95%).

"Los mecanismos del libre mercado son vitales, pero también lo son los que preservan la igualdad social", indican los autores del estudio.

La agencia de la ONU califica de "inseguridad humana" la situación del Este de Europa, fruto de la vertiginosa caída de la renta real,la explosión de la desocupación, la incertidumbre económica y el empeoramiento de los servicios sociales.

La situación económica ha impulsado el crecimiento del mercado negro, que alcanza el 40% de la economía en Yugoslavia, Armenia o Macedonia y el 25% en Rusia. El motivo por el que los europeos del Este eligen las actividades económicas ilegales es el paro.

En Rusia, por ejemplo, hay 10.400.000 desempleados, lo que representa el 14,2% de la población activa. Por otro lado, el 49,3% de los rusosganan una cifra inferior a 1.000 rublos (menos de 6.500 pesetas) al mes, según la Agencia de Estadística de Rusia.

La situación económica ha provocado la caída de la esperanza de vida en el Este. En Rusia, hoy los hombres viven de media hasta los 61,5 años (frente a 62 en 1980) y las mujeres hasta los 73,5.

Según el último Informe Mundial de la Salud de la OMS, la esperanza media de vida del continente europeo se situó en 1998 en 69 años para los hombres y 77 para las mujeres. En España, la espernza de vida se sitúa en 75 años para los varones y 82 para las féminas.