El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, dijo hoy, en su discurso de defensa de la Ley de Capitalidad ante el Pleno del Senado, que hay muchas razones políticas, sociales, legales y económicas que justifican la ley de capitalidad de Madrid y ordena fijar la singularidad de la capital de España.

La Ley aprobada hoy sitúa a Madrid en la "vanguardia" de las capitales europeas, según Sevilla, y respeta la autonomía de las Administraciones participantes en la Ley. Además, dijo, no altera la titularidad de las competencias de las tres Administraciones (Estado, Comunidad Autónoma y Ayuntamiento) sino que las pone en común.

Sevilla destacó, por último, el consenso conseguido entre todas las administraciones que, a su juicio, señala el camino a seguir en otros ámbitos de interés común. Sin embargo, lamentó que no se haya alcanzado el acuerdo unánime.

El senador de IU justificó su voto en contra de la Ley de Capitalidad, entre otros incovenientes, en que no se desarrolla la carta de derechos sociales de los madrileños, porque no contempla el sistema de financiación del ayuntamiento y porque no se descentralizan los distritos de la capital y se dan mayores competencias a las juntas municipales.

El senador explicó que, en definitiva, esta Ley de Capitalidad requeriría para obtener el apoyo de su formación más democracia y mayor participación en los plenos municipales para evitar "tropelías" como las de la M-30, así como mayor similitud con la Carta de Barcelona.

Según dijo, IU ha hecho un gran esfuerzo para estar en el acuerdo pero reprochó al ministro de Administraciones Públicas que no haya trabajado "suficiente" para conseguir el consenso unánime.

En la sesión plenaria del Senado estuvieron presentes el alcalde de Madrid, el popular Alberto Ruiz-Gallardón, el vicealcalde y portavoz del PP, Manuel Cobo, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Trinidad Jiménez, y la portavoz de IU en el Consistorio, Inés Sabanés.