Anafric trasladó esta preocupación en el marco de una reunión con empresas del sector ovino y caprino, en la que se expuso la situación "preocupante" que vive el sector.

Entre los problemas que sufre el sector, Anafric destacó la disminución de la cabaña y el descenso en el número de cebaderos; el encarecimiento de la energía, el combustible y las materias primas; la tendencia a la baja del consumo de carnes, y el alto precio de la carne de ovino.

Asimismo, advirtió de los efectos de la inflación “disparada”, que dificulta la liquidez de los trabajadores y los consumidores; las “cargas administrativas”; las “amenazas” sanitarias; la falta de relevo generacional, y las ayudas “inexistentes” al sector.

Ante esta situación, la asociación pidió a las administraciones que consideren al sector ovino y caprino como “prioritario”, no sólo por su “importancia económica, sino como futuro para una parte importante de la España rural”.