Así lo apuntó la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa que ofreció al término del Consejo de Ministros en la que dio cuenta de que el presidente, “como es habitual”, va a comparecer para exponer las decisiones del Consejo Europeo, “máxime” cuando la reunión de este 24 y 25 de marzo es “muy importante”.

En un primer momento dijo que "muy probablemente" esa comparecencia sería el día 30 de marzo, y en otro momento dio por hecho que será ese día, el miércoles de la próxima semana.

En esta ocasión, según Rodríguez, además de para exponer las “conclusiones” del Consejo Europeo, Sánchez expondrá las decisiones de la Cumbre de la OTAN de esta semana también en Bruselas, así como del Plan Nacional de Respuestas –que prevé aprobar el Gobierno el 29 de marzo- y el “nuevo marco de relaciones” con Marruecos.

Inicialmente, la comparecencia del presidente estaba prevista más para el 5 de abril, pero ha habido “cambio de planes”, según admiten fuentes del Ejecutivo, tras la presión de los grupos parlamentarios para que Sánchez comparezca en el Congreso por el acuerdo con Marruecos.

La portavoz remarcó que para el Gobierno, "que defiende el interés de España”, éste es un “buen acuerdo” con Marruecos “para trabajar en la integridad política y la prosperidad económica”.

Sobre el Sahara, dijo, “España se mantiene en la misma posición, buscar una solución en el marco de Naciones Unidas” y “el plan de autonomía puede permitir avanzar, pero la solución ha de producirse en el marco de Naciones Unidas y ser mutuamente aceptada por las partes”, remarcó.

EXPLICACIONES

La portavoz se remitió en varias ocasiones a que las “explicaciones” en nombre del Gobierno las hará el titular de Exteriores, José Manuel Albares, en la Comisión de Exteriores del Congreso en la que comparecerá este miércoles durante “horas”.

También repasó las distintas comparecencias públicas del ministro desde que se conoció el inicio de esa nueva etapa con Marruecos, porque “el Gobierno está dando explicaciones desde el minuto uno”, y para evidenciar que no se han ocultado ante el hecho de que el presidente no se haya pronunciado públicamente sobre este tema pese a las distintas declaraciones -sin preguntas- que ha protagonizado en los últimos días.

Rodríguez remarcó que “la diplomacia requiere de tiempos y, en ocasiones, de discreción, y es así como el Gobierno ha trabajado un acuerdo que, sin duda, es una buena noticia para España” y que ha requerido de “meses” de contactos.

Se ha producido, afirmó “el cierre de una crisis política en la que estábamos ambos países, que llevaba abierta más de un año” y “era conocido que se estaba trabajando en esta solución”, dijo la portavoz.

“Llevábamos trabajando meses y esto es un acuerdo en el que nos felicitamos, porque redunda en la estabilidad para nuestro país, en la integridad territorial y en la prosperidad económica de España”, aunque no quiso responder si remarcar estos tres pilares supone que antes estaba en peligro la integridad de Ceuta y Melilla, dos enclaves españoles que reclama Marruecos.

Preguntada expresamente por la situación de las dos ciudades autónomas, la ministra indicó que “lo conveniente” es “mirar hacia delante, no hacia atrás” y, por eso, están “satisfechos” con el acuerdo que supone “recomponer las relaciones” bilaterales con el país vecino.

El Ejecutivo insistió este martes en que enmarca el “nuevo marco” con Marruecos en un ámbito bilateral y no atañe a terceros países, dejando fuera a Argelia y quitándole importancia al hecho de que este país haya llamado a consultas a su embajador tras conocerse la nueva relación entre España y Marruecos.

No obstante, Rodríguez ahondó varias veces en que Argelia es también un “socio estratégico, aliado y prioritario para nuestro país y socio estable como suministrador de gas”.