La encuesta, realizada por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, refleja que el 76,7% de los trabajadores reside actualmente en su comunidad autónoma de nacimiento y que quienes trabajan fuera de su lugar de nacimiento lo hacen mayoritariamente en otra localidad de su propia región.

Las regiones con mayor movilidad geográfica son, por este orden, Cataluña, Andalucía y Madrid. En Cataluña, un 17,1% de la población ocupada trabaja en un lugar distinto al de nacimiento, pero el 11,9% lo qu ha hecho es cambiar de residencia sin salir de la comunidad catalana.

Esta pauta de movilidad geográfica sólo cambia claramente en el caso de Madrid, comunidad en la que hay un 14,2% de personas que trabajan fuera de su lugar de residencia y, de ellas, la mitad (un 7,6%) proceden de otras regiones.

MOVILIDAD LABORAL

En cuanto a la movilidad laboral, el 71,1% de los ocupados ha cambiado de empleo a lo largo de su trayectoria profesional, mientras que el 28,9% restante permanece en el mismo pueso de trabajo con el que inició su vida laboral.

En las Fuerzas Armadas es donde menos movilidad laboral se aprecia, ya que sólo el 20,6% de los trabajadores ha cambiado de empleo, frente al 79,6% que se registra entre los trabajadores no cualificados y los operadores de maquinaria y montadores.

Otros sectores de gran movilidad son los artesanos y trabajadores cualificados de la industria manufacturera, con el 74,5%; los de restauración y vendedores de comercio, con un 72,7%, o los administrativos con un 71,6%.

La oportunidad de ascender profesionalmente es la razón que dan la mayoría de las personas que han cambiado de trabajo (20,7%) para justificar la aceptación de un nuevo empleo, mientras que el 18,9% reconoce que el ganar más dinero fue su motivación.

El 9,7% señala que el tipo de contrato le convenía más, el 8,5% que le apetecía cambiar de empleo y el 4% alega que fue el nuevo horario lo que le llevó a cambiar de trabajo.

Entre las personas que no han cambiado nunca de trabajo el 53,2% dice que "era más o menos el empleo que estaba buscando", el 22,3% reconoce que "acepté lo primero que encontré", el 9,3% apunta "la situación económica familiar" como razón para empezar a trabajar y el 6,9% dice que "aunque económicamente no lo necesitaba, quería trabajar".