La portavoz socialista recalcó que “el Gobierno le ha parado los pies a Mañueco y a su vicepresidente García-Gallardo pero nos hemos quedado preocupadas y no queremos que esto se vuelva a repetir”.

A su juicio, “las derechas tienen claros sus objetivos y si hay algo en lo que se ponen de acuerdo casi sin mirarse es sobre nuestros derechos y libertades. Castilla y León quiere ser un laboratorio de pruebas y no lo va a ser”.

La reforma de la ley del aborto que se tramita en el Senado se votará el próximo 8 de febrero. “Vamos a comprobar lo que decide Feijóo, al que no vemos mucho por aquí y aún no tenemos muy claro lo que piensa al respecto”, añadió. “Nunca deja claro su posicionamiento sobre temas importantes pero sí somos conscientes de lo que piensan los populares sobre el derecho al aborto. Lo cierto es que aún tiene un recurso en el Tribunal Constitucional y ya han vetado muchas iniciativas en este sentido”.

La portavoz socialista señaló que “con este texto trataremos de llegar a un consenso para que sea el método científico y no opiniones abiertamente reaccionarias lo que marque el proceso de la interrupción voluntaria del embarazo y para que nadie nos infantilice, coaccione o presione, y podamos decidir libremente”.