Así lo indicó Alegría en declaraciones ante los medios, donde recordó que el beso de Rubiales a la jugadora Jenni Hermoso tuvo lugar el domingo 20 de agosto y el lunes siguiente el ministro de Cultura y Deporte en funciones, Miquel Iceta, se refirió a este tipo de actuaciones y manifestaciones como “inaceptables” y pidió a Rubiales “explicaciones y una disculpa”.

El martes, continuó, el presidente del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, “siguió tildando de inaceptable las disculpas de Rubiales” y exigió “que se dieran más pasos”. El miércoles, destacó, la Federación convocó una asamblea para el viernes y ese mismo día el presidente del Consejo Superior de Deporte anunció que si la Federación no adoptaba actuaciones “el Gobierno lo haría”.

Asimismo, el viernes Rubiales dijo que no iba a dimitir y el Ejecutivo, a través del Consejo Superior de Deportes, trasladó que presentaba una denuncia frente al TAD sobre “abuso de autoridad” y “perjuicio provocado al deporte en este país”. “El TAD está viendo ya, esta misma mañana, esa denuncia”, expuso.

“Por tanto, máxima celeridad en el proceso y eso sí, también con el cumplimiento escrupuloso de todos los procedimientos. Hace una semana que estos hechos se produjeron y hoy el señor Rubiales ya no es el presidente de la Federación”, manifestó.