Un miembro del Comité Ejecutivo del PP, que pidió guardar el anonimato, explicó hoy a Servimedia que el papel de su partido debería haber sido sido arremeter contra el cómic, pero añadió que no ha sido necesario ante el aluvión de críticas que ha recibido de la prensa y del sector "renovador" de os socialistas.

El viernes pasado, un día después de que el secretario de Organización del PSOE, José María Benegas, presentara la campaña, que se desarrollará bajo el lema "La fuerza del futuro", el total de la misma (que incluye 1.700 mítines y conferencias por toda España) quedó difuminado por las críticas al tebeo. En sus quince páginas se narra visualmente, de forma acrítica, la evolución de una familia media española de 1982 a 1992.

A las opiniones de rechazo en la práctica totalidad de losperiódicos y emisoras de radio, se unieron informaciones de "fuentes del sector renovador" que censuraban abiertamente la oportunidad de lanzar en plena crisis un tebeo que destila "triunfalismo" y que técnicamente "no tiene garra".

Desde el sábado, miembros del PSOE integrados en el sector "renovador" han puesto nombre y apellido en las críticas a una iniciativa que se adjudica a Alfonso Guerra y al `aparato' del PSOE. Entre otros, Joaquín Leguina ha dicho que prefiere leer "Mortadelo y Filemón"; Jos Barrionuevo, que "no es serio", y Carlos Solchaga que "yo nunca hablo de tebeos, señores".

En estas circunstancias, aseguró el alto cargo del PP consultado hoy por esta agencia, el partido se ha limitado a resaltar el mensaje de que "España no está para chistes" u otros, como el lanzado ayer desde la sede nacional, tras la reunión de la Comisión Permanente conservadora, en el sentido de que "Aznar teme que la división en el PSOE impida al Gobierno tomar decisiones".

MAS DE 90 MILLONES

La direción del PP ni siquiera se ha molestado en dar instrucciones a los responsables electorales de su partido (reunidos el viernes y sábado pasado en Madrid) para contrarrestar el `puerta a puerta' que piensan llevar a cabo los socialistas en un millón y medio de domicilios.

Por otro lado, los responsables del PP consideran que es económicamente "imposible" que la campaña conmemorativa de los diez años de gobierno haya costado sólo 90 millones de pesetas, como explicó Benegas en la presentación de los acto.

Argumentan que organizar 1.700 mítines en ciudades de más de 20.000 habitantes, editar dos millones de copias del cómic en cuatricomía y organizar decenas de conferencias (con viajes de conferenciantes y gastos varios) e insertar publicidad en medios de comunicación supera con mucho esa cifra.