En declaraciones a Servimedia, la secretaria general del Sppme, Teresa Sirera, expresó su "sorpresa" por la trama de extorsión que existía en el municipio madrileño de Coslada desde hace 11 años y aseguró haberse quedando "tiritando" al conocer que al frente de la misma se encontraba el jefe de la Policía Local.

Sirera aseguró que "debería existir un organismo, una comisión o una unidad encargada de controlar, detectar e investigar" las denuncias de los ciudadanos sobre el funcionamiento de la Policía Municipal, ya que así podrían destaparse con mayor rapidez tramas como la de Coslada.

"Hay que establecer una unidad de asuntos internos en cada comunidad, que sea la encargada de ver qué hay de cierto en determinadas actitudes y que investigue las quejas de los ciudadanos. Tiene que haber un equipo de personas serias y profesionales que investiguen un asunto y, si encuentran alguna irregularidad, que actúen en consecuencia", sentenció.

Sirera criticó que "nadie haya tomado cartas en el asunto" de Coslada a lo largo de 11 años, aunque al mismo tiempo envió un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía porque "aunque tarde, la Justicia ha funcionado".

A su juicio, es "inconcebible" que gran parte de la plantilla de agentes municipales de Coslada pertenecieran a la trama, sobre todo el jefe, ya que tener a una persona corrupta al frente de la Policía es "como poner la zorra al cuidado del gallinero".

Sirera adujo que la placa de agente municipal "no hay que llevarla sólo en la camisa, tambien en el corazón", por lo que pidió mejorar los mecanismos de acceso a la Policía y los posteriores de control de mandos y agentes, con el fin de garantizar un buen servicio a los ciudadanos.