Así se pronunció este lunes Fernández durante una rueda de prensa celebrada en la sede de Podemos en la capital, donde calificó de "gravísimo error" la visita de este domingo de Felipe VI, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Mazón a la zona cero afectada por la DANA y defendió la reacción de los valencianos que les recibieron con gritos de “asesinos”, “fuera” y les lanzaron barro a modo de protesta por los fallos en la difusión de la alerta y la gestión de la crisis.

El portavoz de Podemos considera más importante “la ayuda” que “la foto” y por ello tacha de “error” esta visita, donde “era evidente” que los afectados “no les iban a recibir con aplausos”. Además, valoró que la coordinación entre el Gobierno valenciano y el central “es insuficiente” y responsabilizó también al Ejecutivo de Sánchez de que “se haya llegado a la situación a la que se ha llegado en estos momentos”, puesto que considera que, aunque “el principal responsable es Mazón”, su “calamitosa gestión no exime tampoco de su responsabilidad al Gobierno” central.

En este sentido, defendió que “desde el primer día era evidente que el Gobierno de la Generalitat estaba totalmente desbordado y que no iba a tener la capacidad de gestionar la situación conforme a lo que hubiese sido necesario hacer en cada momento” y tachó a Mazón de “inútil”, “incompetente” y “negligente” a la hora de avisar de lo que iba a ocurrir, ante los avisos de la Aemet, lo que, según Fernández, le “incapacita para gestionar la situación de crisis posterior”.

Podemos exigió la declaración del estado de alarma para transferir el mando político de la situación al Gobierno central y la puesta en marcha de un decreto de escudo social “para atender las necesidades de los afectados”. Sin embargo, lamentó que “el Gobierno está enfrascado en una lucha táctica con el Gobierno de Mazón” y lamentó que “durante varios días no ha llegado ningún tipo de ayuda a pueblos donde la gente ha tenido que convivir con cadáveres en sus propias casas”.

También señaló que en estas localidades, como Paiporta o Montserrat, los ciudadanos "se quedaron sin luz, sin agua, prácticamente sin comida y no recibieron la menor atención hasta pasados varios días”. Denunció así “el abandono y el desamparo”, que valoró como “inaceptable”. “Esto no solo puede ser achacable a la nefasta y catastrófica gestión del Gobierno de Mazón y del Partido Popular”, sino que también “el Gobierno de Sánchez tenía en su mano la capacidad de intervenir desde el primer día”.

Por ello, considera que “no había que esperar a que el negligente, el inútil de Mazón, pidiera absolutamente nada, había que tomar el mando y actuar por urgencia y con las medidas extraordinarias que estaban haciendo falta”.