Este acto, que tuvo lugar en la plaza de Sant Jaume, estuvo encabezado por el candidato a la Generalitat del Partido de la Ciudadanía, Albert Rivera, quien fue arropado por simpatizantes y militantes que acudieron a la convocatoria de esta fuerza política.

En este sentido, en esta concentración en Barcelona estuvieron presentes, entre otros, Xavier Pericay, Francesc de Carreras, Albert Boadella y Arcadi Espada.

Por lo que se refiere a otras organizaciones políticas, todas las cuales habían sido invitadas al acto, el único representado fue el PP, que contó con la presencia de Daniel Sirera, secretario ejecutivo de Comunicación de los populares catalanes.

En su intervención, Rivera resaltó la voluntad de su formación de trabajar por un clima de conciliación desde la defensa de valores fundamentales como la libertad y la igualdad, por encima de las diferencias y sin caer en "la incitación a la confrontación o la justificación de determinados actos violentos".

Rivera criticó el legado del Gobierno que ha presidido Pasqual Maragall, puesto que ha "tolerado y fomentado aquello de que el buen catalán es aquel que habla en catalán".

Esta ecuación, según este candidato, ha derivado en que "o eres nacionalista o no eres un buen catalán, algo que de ninguna manera debería ser así". A este respecto, Rivera añadió que su partido defiende la posición "de los que nos sentimos catalanes sin ser nacionalistas".

Asimismo, el Partido de la Ciudadanía criticó la ausencia del resto de partidos en esta convocatoria, ya que con la misma se pretendía "condenar la espiral de violencia que está viviendo Cataluña desde hace unos meses".