Dos voluntarios de la Fundación Cione Ruta de la Luz, Pedro Duc y Marian Hierro, acaban de regresar de un proyecto en la ciudad marroquí de Kenitra, que se encuentra en la costa de país magrebí, junto a la desembocadura del rio Sebú, y es capital de provincia dentro de la región de Rabat Salé Kenitra.

Es, además, puerto fluvial, el único que hay en Marruecos, y tiene una población cercana al medio millón de habitantes. El proyecto se llevó a cabo con Equatorial Coca-Cola y la Fundación Elena Barraquer, que dio soporte logístico a la expedición de la Ruta de la Luz. En esta ocasión, el viaje tuvo una dimensión quirúrgica y oftalmológica.

Entre la población de Kenitra, un grupo de adultos y sobre todo de jóvenes presentaban problemas visuales equiparables a los habituales en España como graduaciones con pocas dioptrías ante las que se pudo mejorar de forma sustancial el rendimiento visual y los problemas de visión binocular. En cambio, otras muchas personas en la periferia de la ciudad se diagnosticaron ametropías muy elevadas y problemas de salud visual dramáticos.

675 REVISIONES

Los ópticos de la Ruta de la Luz trabajaron siempre en las instalaciones del Hospital El Idrissi, donde llevaron a cabo 675 revisiones y prescribieron 275 gafas. Los talleres solidarios de la Ruta de la Luz trabajan ahora para fabricarlas, completamente nuevas. Una vez estén listas, se enviarán a la ciudad marroquí para que sean entregadas a los beneficiarios. Además, sobre el terreno, los ópticos de la Ruta de la Luz entregaron 100 gafas de sol y 100 gafas premontadas para visión de cerca.

La colaboración con la Fundación Elena Barraquer permitió además a los ópticos colaborar con los oftalmólogos en las fases de pre y post operatorio.