Así lo anunció este jueves la entidad en un comunicado en el que precisó que la demanda la presentó ante los Juzgados de lo Mercantil de Valencia y que esta indemnización pretende “resarcir” a los propietarios que pagaron un “sobreprecio” en la compra de sus vehículos “debido al pacto colusorio realizado por las citadas marcas”.

En concreto, merced al análisis pericial efectuado, OCU solicita el 10,61% del precio de compra, en concepto de indemnización por el “perjuicio” ocasionado a los consumidores, que, a su entender, adquirieron un vehículo por un importe “superior del que deberían haber pagado de no haber existido acuerdos contrarios a la competencia”.

“A este importe se han de añadir los intereses de demora, desde la adquisición del vehículo, lo que equivaldrá por tanto a una indemnización total de entre un 14% y un 17,5% en función de la fecha de compra”, abundó.

Los beneficiarios de esta acción son los compradores de un vehículo de Ford entre febrero de 2006 y julio de 2013, Mitsubishi de marzo de 2010 a agosto de 2013 y BMW de junio de 2008 a agosto de 2013, por ser “los periodos acreditados en el que los correspondientes fabricantes participaron en el pacto ilegal”.

Dos de las demandas presentadas en octubre de 2023 ya han sido admitidas a trámite y la organización dijo “esperar que esta que se presenta ahora corra la misma suerte y se haga justicia para los afectados”.