Así lo aseguró en un comunicado en el que presentó los principales resultados de su análisis realizado a un total de 29 salmorejos refrigerados y que, a su juicio, “revela que no hace falta gastar más de dos euros para disfrutar de un producto de buena calidad”, como el Salmorejo Auchan de Alcampo (1,68 euros/litro), que, según el estudio, “destaca” por su sabor, “algo ácido”, así como por “su viscosidad y un bonito color naranja”.

Junto a él, otro producto con una “excelente” relación calidad precio es el Alipende de Ahorramas (1,70 euros/litro), que, según OCU, se caracteriza por un sabor “de intensidad moderada, sin defectos”, y una “excelente apariencia”.

Salvo en el caso del Salmorejo Fresco de Casa Mas, los analizados no incorporan aditivos, si bien, además de tomate, pan, aceite de oliva y sal, la “inmensa mayoría” añaden vinagre para “asegurar una mejor conservación y potenciar el sabor” mientras “otros muchos” incluyen pimiento rojo para “intensificar” el sabor y el color del producto.

La organización también observó que resulta “habitual” que se sustituya la miga de pan de la receta casera por pan rallado para “ligar mejor” el producto y que otro ingrediente añadido suele ser el agua, sobre todo en algunos productos envasados en brick y que, según su punto de vista, “puede delatar el uso de tomates poco maduros”.

La investigación también señala “bastantes diferencias” en el etiquetado, pues, a pesar de ser productos saludables, según sus cálculos “apenas uno de cada tres incluye la calificación Nutriscore”. En este sentido, consideró que “son raros” los que especifican el porcentaje “exacto” de los principales ingredientes y explicó que en 10 de ellos “ni siquiera se indica el porcentaje total de hortalizas”.

El salmorejo envasado tiene menos calorías que uno casero, ya que incorpora menos pan y la cantidad de aceite de oliva “suele ser menor”, según OCU, que espetó que, por el contrario, tiene “menos fibra”, ya que, a diferencia de la receta tradicional, las hortalizas “suelen estar peladas" y esta sopa fría "tiene que pasar por una serie de tamices”.

Finalmente, la organización también lamentó que en cinco de los productos analizados no se señale “alguna forma de contacto con la empresa”.