De la Cierva opina que el conde de Barcelona pudo haber sido rey de España. "En 1941, el sucesor de Franco era él, pero estuvo muy mal aconsejado en esos años decisivos por personalidades como José María Gil-Robles, Pedro Sainz Rodríguez o Eugenio Vegas, entre otros, que le pusieron encontra del general".

"Don Juan no tendría que haber sacrificado más que lo que hizo don Juan Carlos tras ser nombrado sucesor", añadió, "pero estas personas, resentidas con Franco y faltas de información, le hicieron levantar una hostilidad que cerró esa posibilidad".

A partir de ese enfrentamiento, el jefe del Estado se volvió "tremendamente injusto y agresivo" contra el que representaba su opositor por el poder, según Ricardo de la Cierva.

"Franco no actuó de forma correcta y limpia con do Juan", explicó De la Cierva a Servimedia, "con gestos como negarle asistir a la jura de bandera del entonces príncipe Juan Carlos; pero sabía que abrirse a él era peligroso".

Como ser humano, el historiador destacó del conde de Barcelona la "cercanía" y "el interés por todos los que iban a verle a Villa Giralda", en Estoril (Portugal).

Ricardo de la Cierva recuerda también la simpatía de don Juan el día que éste le entregó una placa de "popular del diario Pueblo" (periódico dirigido por Emilio Rmero), que le asignaron junto a Enrique Tierno Galván y la actriz Susana Estrada.