Estas actuaciones forman parte del Programa Vías Verdes, cuyo objetivo es recuperar las infraestructuras fuera de uso, como los antiguos trazados ferroviarios, las cañadas y los caminos históricos, para destinarlas a usos alternativos, como el turismo ecológico y cultural.

Las vías verdes se usan para actividades de senderismo, cicloturismo, rutas a caballo e itinerarios naturales y culturales. Este programa inteta favorecer el desarrollo sostenible, fundamentalmente en áreas rurales.

Las condiciones que debe reunir una infraestructura para que pueda acondicionarse como vía verde son que su itinerario sea continuo y tenga cualidades paisajísticas, históricas, naturales y culturales de interés.

Además, de las vías verdes puestas en servicio en 1998, localizadas en Girona, Sevilla, Cantabria, Valencia, León, Cádiz, Huelva, La Rioja, Murcia y Cantabria, otros 100 kilómetros se encuentran en fase de ejecució, y para los cuales se cuenta con un presupuesto de 600 millones de pesetas.