Médicos del Mundo y otras organizaciones no gubernamentales que trabajan en Afganistán han condenado de forma rotunda la decisión de las autoridades afganas de no permitir a las mujeres trabajar para ONG nacionales e internacionales en el país. Ante esta situación, Médicos del Mundo ha respondido con la suspensión de sus actividades.

Tal y como recordó esta organización, mientras Afganistán se enfrenta al colapso económico y a una grave crisis humanitaria, las ONG desempeñan un papel esencial para salvar vidas y llevar ayuda a la población. “Prohibir trabajar a las mujeres solo tendrá un impacto dramático y devastador en las vidas de millones de mujeres, hombres y niños en situación vulnerable en el país”, destacaron desde Médicos del Mundo.

Además, alertó de que al prohibir que las mujeres trabajen en ONG “se ha cruzado una línea roja”. Por ello, la organización “ha tomado la difícil decisión de suspender sus actividades porque considera que una respuesta humanitaria eficaz y acorde con los principios humanitarios no puede lograrse sin las mujeres. Una decisión que también han tomado varias ONG en el país desde el anuncio el pasado 24 de diciembre”.

Médicos del Mundo reiteró que es fundamental que se levante la prohibición y que las mujeres cooperantes reanuden sus actividades en Afganistán.

Esta decisión de las autoridades afganas se produce además pocos días después de que aumentaran las restricciones al acceso de las niñas afganas a la educación.

Tras estar presente en el país durante 30 años, de 1982 a 2012, Médicos del Mundo volvió a trabajar en el país a finales de 2021. Actualmente, la organización está apoyando un hospital de distrito a través de la rehabilitación física de la estructura y el apoyo en salud materno-infantil. 150.000 personas se benefician de los servicios médicos que ofrece este hospital.