MAZOWIECKI CITICO EL EXCESIVO PODER ACAPARADO POR WALESA COMO PRESIDENTE DE POLONIA

SAN LORENZO DEL ESCORIAL
SERVIMEDIA

Tadeusz Mazowiecki, ex primer ministro de Polonia, criticó hoy en San Lorenzo de El Escorial (Madrid), el excesivo poder que, a su juicio, ha acaparado el presidente de Polonia, Lech Walesa.

El presidente del partido político Unión Democrática analizó la situación de su país en el marco del curso de verano "Los problemas sociales cien años después de la 'rerum novarum'", organizao por la Universidad Complutense.

La diferente concepción política no estriba en la elección de sistema presidencialista a un sistema parlamentario, continuó, sino en la distinción entre un equilibrio constitucional y una concentración excesiva de poder en una sola persona.

Aunque Mazowiecki reconoció la gran labor ejercida por Walesa y el sindicato Solidaridad en la etapa del régimen comunista en Polonia, dijo que ahora esa organización tiene que recuperar su papel de central sindical exclusivamnte, y abandonar esa actitud de "cuasi partido" a la que ha llegado.

En cuanto a las relaciones con el presidente de Polonia, el político afirmó que son inexistentes, ya que, después de varios intentos para entrevistarse con él, nunca recibió una respuesta positiva.

En relación a las pasadas elecciones de noviembre, donde sufrió una derrota política, Mazowiecki afirmó que Walesa utilizó en la campaña promesas utópicas sobre las que vuelve continuamente.

Como ejemplo, citó la "intención imposble" de Walesa de repartir cien millones de zlotys, la moneda polaca, por cabeza. "Aunque la mayoría de los países utilizan la falsa promesa electoral, en el nuestro adquiere una dimensión dramática, porque las esperanzas de los electores están dirigidas a necesidades básicas".

IGLESIA-ESTADO

En cuanto al papel de la iglesia católica, preponderante en la historia pasada y reciente de Polonia, Tadeusz Mazowiecki abogó por la conveniencia de alcanzar un estado aconfesional.

Después de asegurar qu "la época de los estados confesionales ha pasado", el conferenciante que el cambio que tiene que sufrir la iglesia, "cuya misión fue la de asilo durante el comunismo, lleva emparejado un proceso largo y problemático".

Los problemas no sólo provienen de la Iglesia, sino también por parte de los laicos y de los políticos que intentan legitimarse a través de ella.

Las relaciónes entre Iglesia y Estado tienen que ser amistosas y basarse en el diálogo y la tolerancia, sin olvidar el papel fundamentalque protagonizó la Iglesia durante el autoritarismo, recalcó Mazowiecki.

"No podemos olvidar que cuando estábamos en la oposición exigíamos un posicionamiento claro de la Iglesia católica contra el autoritarismo", recordó, para agregar que "ahora, también tienen derecho a hablar y a desempeñar un papel, por ejemplo, dentro de la educación". Aunque matizó que la enseñanza debe ser siempre libre y plural.

LIBRE MERCADO

Referente al sistema económico elegido, Tadeusz Mazowiecki explicó que si habín escogido la vía del capitalismo y la del libre mercado no fue debido a la ingenuidad de pensar que "nos íbamos a encontrar con un paraíso".

Para el ex ministro polaco, la situación de su país no permitía experimentos nuevos, porque "ya habíamos tenido bastantes y con resultados negativos".

Por eso, criticó el tercer camino económico experimentado por Yugoslavia, aunque concretó que la economía social del mercado propuesta en Polonia no significa el protagonismo exclusivo de los principios de prpiedad privada.

Por el contrario, supone que, al distribuir el producto nacional bruto, las autoridades tendrán en cuenta los problemas sociales como la sanidad o la situación de los estudiantes.

ELECCIONES

Sobre las elecciones del próximo 26 de octubre, Mazowiecki predijo una situación de equilibrio político derivada de los resultados. "Me gustaría que mi partido, Unión Democrática, consiguiera un amplio respaldo. Sin embargo, creo que nadie alcanzará la mayoría por lo que habrá que gobernar e coalición".

La solución al problema del decantamiento general de la sociedad y su bajo nivel de participación política debe pasar, en su opinión, por demostrar al pueblo una escena política constructiva y no llena de discusiones y problemas.

Sin embargo, afirmó que es un problema que no tiene que dramatizarse ni exagerarse, porque se enmarca en un proceso general que afecta a todos los países.

Mazowiecki señaló que cuando la situación es opresiva, se registra una mayor participación del puelo, que disminuye en el momento en que el panorama se normaliza. Un momento de euforia no puede durar siempre".

TRANSICION DOLOROSA

En referencia a la transición política y económica en Polonia, el ex presidente polaco recalcó que el paso a una sociedad democrática ha supuesto un proceso doloroso, cuyo principal problema es conseguir conciliar la idea de consenso social con la plurarización necesaria en todo régimen democrático.

Para ello, su partido propuso el llamado "pacto para Polonia" entedido, por una parte, como un consenso en los principios de reforma económica y política exterior y, por otra, como la participación de todos los sectores sociales a la solución de los problemas del país.

(SERVIMEDIA)
01 Ago 1991
M