Según informaron fuentes asistentes a la reunión, que se celebró a puerta cerrada, Matilde Fernández criticó desde la tribuna algunas actitudes de la Comisión Ejecutiva Federal, dejando en segundo plano el balance de las elecciones vascas, que centró el debate interno.

En primer lugar, criticó a la dirección socialista por no haber estado a la altura de las circunstancias ante las discrepancias surgidas entre CCOO y UGT, a raíz de la reciente reforma laboral aprobada por el Gobierno. Fernández alertó al líder socialista de que las críticas del Ejecutivo a UGT buscaban en el fondo atacar al PSOE, por lo que consideró que el partido debería haberse mostrado más cercana al sindicato.

Además, lamentó que el secretario general del PSOE dijera con convicción que no le gustan las huelgas generales y que es siempre partidario de agotar las vías de negociación previas. En este punto, recordó que ella sufrió como ministra las protestas sindicales contra el Gobierno socialista.

Finamente, Matilde Fernández consideró que la Comisión Ejecutiva no ha estado "despierta" para reaccionar a la "manipulación infumable" de los medios de comunicación públicos, y algunos privados, durante loa reciente campaña electoral en Euskadi.

A todas estas críticas respondió después directamente Rodríguez Zapatero en tono cordial, al defender, en primer lugar, la autonomía del partido y de los sindicatos. En este sentido, el líder socialista se mostró partidario de mantener el mismo criterio sobre lascosas tanto en el Gobierno como en la oposición y, precisamente por que el PSOE sufrió varias huelgas generales, debe evitarlas.

En cuanto a las iniciativas de los "barones", Rodríguez Zapatero coincidió en la necesidad de mantener la coherencia interna, pero agregó que debe ser compatible con la pluralidad de España y con las singularidades de cada comunidad autónoma.

En relación a la actitud de los medios de comunicación, el líder socialista rebatió los reproches de Matilde Fernández y aseguró ue los dirigentes del PSOE han denunciado reiteradamente, incluso en ruedas de prensa y con documentos específicos, el tratamiento sesgado de la campaña electoral.