Con esta cifra de visitantes se han superado las previsiones más optimistas y se llega al 10 por ciento de las visitas previstas para los seis meses que permanecerá abierta la exposición universal, que, según los organizadores, es de 40 millones de personas.

En los primeros 20 días de la Expo-92 la media de visitas diaria al recinto fue de 200.000. La mayoría de estos visitantes fueron de nacionalidad española, principalmente sevillanos, en contra de lo previsto inicialmente, que apuntaba una mayor afluencia de extrajeros.

La organización de la Exposición Universal ha fijado la jornada de mañana como "día azul", por lo que las entradas costarán 2.000 pesetas, la mitad de su precio habitual. Este es el segundo "día azul" desde que la Expo-92 abrió sus puertas. La entrada de noche costará 500 pesetas.

Por otro lado Israel celebró hoy su día de honor en la muestra universal, que contó con la presencia, en los actos conmemorativos, del ministro de Hacienda israelí, Yitzhk Modai, que abogó por "la paz en España, en el mundo y sobre todo en el Oriente Medio".