En un comunicado, informa que la primera agresión se produjo a la una de la madrugada cuando un ciudadano que llegó en ambulancia agredió a una enfermera cuando ésta le preguntó por sus síntomas. La segunda se produjo tres horas más tarde fue golpeada por el familiar de un enfermo tras indicarle que agardara en la sala de espera.

Satse ha puesto en conocimiento los hechos ante la Dirección de Enfermería del centro para que tomen las medidas oportunas petición que también respalda el Comité de Seguridad y Salud del hospital.

"Desgraciadamente, las agresiones físicas y verbales a la Enfermería no son hechos puntuales. Se suceden de forma habitual en las urgencias de los hospitales de la región".

En su opinión, esta situación es fruto de la tesión que existe y de la saturación de estos servicios como consecuencia de la presión asistencial.