Este plan, según explicó el vicepresidente, supone la instalación de más de 10.000 protectores fabricados con un material de poliuretano que permite absorber el golpe. Además, la forma de éstos evita que, en caso de accidente, el motorista sufra cortes o resulte con órganos seccionados, algo que hasta el momento venía ocurriendo enmuchas ocasiones.

Cortés explicó que este proyecto, que se acaba de poner en marcha, supondrá la instalación de dos modelos de protección, uno más abombado y otro más lineal, aunque ambos tienen iguales prestaciones. Estos protectores envolverán los postes verticales, suprimiendo de esta forma los bordes cortantes, causa principal de los daños sufridos por los motoristas.

Al contrario de lo que normalmente se cree, cuando ocurre un accidente de moto, su conductor sale desplazado y es al golpear cntra estos perfiles verticales más que con el quitamiedos horizontal, cuando corre peligro de sufrir cortes vitales por la velocidad con la que choca.

El vicepresidente indicó que los protectores se colocarán en varias fases, en un primer momento se instalarán en las carreteras más utilizadas por los motoristas y, por tanto donde se han producido mayor número de accidentes de este tipo que, básicamente, corresponden al cuadrante suroeste de la región.

"Se acaba de iniciar la instalación en la caretera M-505, la de El Escorial y posteriormente se seguirá con la M-501, la conocida como carretera de los Pantanos; la M-600, entre Brunete y Navalcarnero y la M-404 entre Navalcarnero y Griñón", explicó Cortés. La primera inversión prevista es de 20 millones de pesetas y será aumentada a medida que se vaya ampliando este sistema al resto de carreteras autonómicas.