En una nota de prensa, Cáritas española da a conocer el texto de la citada declaración, hecha publica ayer en Jerusalén.

La declaración denuncia que "un millón y medio de personas aisladas y sin acceso a alimentos y comida, 800.000 de ellas sin suministro eléctrico", es la consecuencia del bloqueo israelí a Gaza.

"Este castigo ilegal colectivo supone un acto inmoral de violación de las más elementales leyes naturales y humanas, y de la legislación internacional que no puede ser tolerado jamás", añade.

Por ello, los líderes religiosos de Tierra Santa entienden que "el bloqueo de Gaza debe terminar inmediatamente", y urgen a la comunidad internacional, al presidente de los Estado Unidos, George W. Bush, y a las autoridades israelíes a que pongan fin a este sufrimiento.

También pide a Israel que ponga en marcha la iniciativa del primer ministro, Salam Fayyad, sobre el control palestino de las fronteras, a fin de normalizar el suministro de medicinas, alimentos, combustible y bienes hacia Gaza.