En una entrevista en Servimedia, la candidata explicó que con esta medida Podemos pretende que los pequeños y grandes propietarios pongan sus viviendas dentro de la inmobiliaria pública y acepten un precio regulado por el que a cambio recibirán incentivos y ventajas a nivel fiscal.

Dentro de esos incentivos se refirió al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) que “estaría bonificado al 100% por parte de la Comunidad de Madrid”. “No tendría que pagarlo el casero que pusiera su vivienda a disposición de la inmobiliaria pública”, indicó.

Sin embargo, no sería la única garantía que propone el plan, ya que Jacinto añadió que también “se incluirían ayudas para la rehabilitación y la reforma de hasta 5.000 euros”, al tiempo que la Comunidad de Madrid se encargaría “de las gestiones del cobro de la renta por anticipado el 1 de cada mes para cada casero”.

“De esta forma los caseros van a tener la tranquilidad de poder cobrar las rentas, de tener ayudas a la rehabilitación y de tener una serie de garantías pagadas por adelantado”, arguyó.

Señaló que el objetivo de estos incentivos es “no tener que poner necesariamente las viviendas en alquiler en las inmobiliarias privadas” porque “algunas de ellas estratégicamente son las que están determinando los precios del mercado”.

De este modo, “habrá un precio regulado para que los alquileres bajen” y “los inquilinos puedan acceder a las viviendas a precios mucho más asequibles”. En ese sentido, reconoció que “habrá caseros a los que no les interese este tipo de mecanismos porque su nicho de negocio está en alterar los precios del mercado”, por lo que “habrá que sancionarlos a través de la tasa Blackstone”.

Así, detalló que la tasa Blackstone es “un impuesto de patrimonio inmobiliario al 2,5%” cuyo fin es “incentivar la movilización de la vivienda” y evitar “el afán recaudatorio”. “Por supuesto que la propiedad privada es sagrada”, aseveró, pero también “tiene un uso social recogido en la Constitución”.

Sobre la medida propuesta por la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, de aumentar la oferta de vivienda para bajar el precio de los alquileres, Jacinto dijo que apostar únicamente por la construcción de vivienda es no haber aprendido “absolutamente nada de la burbuja del ladrillo de 2008”. “En el año 2005 se construyeron en este país más viviendas que en Francia, Alemania e Italia juntas y eso no produjo una bajada de precios, sino una burbuja”, zanjó.

RECUPERAR EL IMPUESTO DE PATRIMONIO

Para financiar los incentivos que propone su partido, Jacinto apostó por recuperar el Impuesto sobre el Patrimonio “que a día de hoy no se paga en la Comunidad de Madrid y que son 992 millones de euros que los ricos se ahorran y no pagan”.

Además, aseguró que el presupuesto que destina el Gobierno madrileño en políticas de vivienda “está siendo malgastado” ya que “sólo se ha ejecutado un 14% para rehabilitación de vivienda”. En esa línea, denunció que el programa 'Mi Primera Vivienda' “supuestamente era para avalar a los jóvenes a la compra de una vivienda y, al final, no está sirviendo para lo que se decía”.

OKUPACIÓN "POR EXTREMA NECESIDAD"

Preguntada por los casos de okupación, Jacinto pidió “no perder el foco” cuando se habla del tema. Asimismo, celebró que “los casos van bajando incluso en la propia Comunidad de Madrid” y concretó que “hay alrededor de 4.000 okupaciones” de las cuales “2.000 se producen en viviendas públicas”. Es decir, “viviendas que están vacías y no se han adjudicado a ningún inquilino”, precisó.

“Hay personas demandantes de vivienda pública que llevan en lista de espera más de diez años”, criticó. En esta línea, se mostró convencida de que “hay okupaciones que, sin duda, se producen por situaciones de extrema necesidad”.