En nombre de IU-ICV, Isaura Navarro reclamó el "reconocimiento de las tres lenguas, la obligación de garantizar que en los territorios en los que se hablan los ciudadanos puedan dirigirse a la Administración en su propia lengua".

Asimismo, pide que en estos territorios "se incluya la lengua en el currículum escolar y académico, y que en todo el territorio aragonés se garantice la enseñanza a aquéllos que quieran aprenderlas".

"Desde IU, estamos orgullosos de haber logrado introducir en el texto estatutario la obligación de realizar una ley de lenguas y el marco de desarrollo de la misma", concluyó, una cuestión sobre la que "no debe hacerse electoralismo, porque lo que necesitan los aragoneses es una ley sustentada en un amplio debate".

El diputado de CiU Jordi Xuclá reclamó que la ley de lenguas cuyo desarrollo prevé el texto de la reforma estatutaria que se empieza a tramitar en el Congreso prevea el reconocimiento de esta pluralidad en la Comunidad de Aragón.

Agustí Cerdà, de ERC, que se dirigió a los representantes del Parlamento aragonés en catalán, recalcó también que a ambas comunidades les une "más que una simple vecindad", y reclamó que se resuelva el problema lingüístico.

En nombre de la Chunta Aragonesista, el diputado José Antonio Labordeta expresó su rechazo a la propuesta de reforma del Estatuto, porque "no da la mejor solución posible a los problemas estructurales y de fondo para la financiación de Aragón, como lo han conseguido otras comunidades autónomas".