IRAQ. AZNAR: "SADAM HUSEIN NO PUEDE SER EL GRAN ELECTOR DE LAS MUNICIPALES"

- Afirma que la posición de Zapatero es un "riesgo nefasto y funesto" para el futuro de España

- Exige a Zapatero que expulse del PSOE a los militantes que hayan atacado las sedes del PP

- Considera que PSOE e IU están "encadenados" y han perdido o tirado la llave del cadado que les une

SANTIAGO DE COMPOSTELA
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, José María Aznar, afirmó hoy que el "gran asesino" Sadam Husein "no puede ser el gran elector de las elecciones municipales" del próximo 25 de mayo e hizo un llamamiento al voto responsable de los ciudadanos para que los alcaldes de ciudades como Santiago, Vigo, Lugo, Orense, Madrid o Barcelona no dependan de la guerra en Iraq.

Aznar volvió a clausurar un gran acto público del Partido Popular dos meses despuésde que, el 8 de febrero, participara en Arganda del Rey (Madrid) en otro mitin y un joven le interrumpiera con gritos de "no a la guerra" por su apoyo a Estados Unidos y Gran Bretaña en la crisis internacional. Esta vez, ante casi 10.000 simpatizantes populares, no hubo incidentes.

El jefe del Ejecutivo advirtió de que la crispación política entre oposición y PP no puede "desvirtuar" las elecciones autonómicas y municipales por las diferencias que mantienen unos y otros respecto al conflicto bélico enIraq. "Husein no puede participar en las elecciones, no se le puede dar esa alegría", recalcó mientras instaba a todos los militantes populares a presentar a los ciudadanos la gestión de los últimos años.

"Si creen que nos van a intimidar, se equivocan; si creen que nos van a asustar, se equivocan; si creen que nos vamos a meter debajo de la mesa, se equivocam; si creen que no vamos a salir a defender nuestros principios a la calle, se equivocan; si creen que no nos vamos a atraver, se equivocan; si ceen que nos van a achantar, se equivocan; si creen que vamos a dar cuatro pasos hacia atrás se van a encontrar con que vamos a dar ocho pasos adelante. Todos los días y todas las veces que haga falta".

Aznar garantizó que nadie va a "sacar de la pista" al Partido Popular, "ahora menos que nunca", por lo que pidió a los integrantes de su formación que salgan a la calle "con la cabeza bien alta" por el trabajo que han llevado a cabo en los últimos años. Presumió de "unidad, cohesión y fortaleza" internafrente a "tanta injuria, tanto ataque y tanta desvergüenza" de la oposición y se mostro convencido de que "la democracia acaba poniendo a cada uno en su sitio".

Explicó que, frente al oportunismo y la demagogia de Partido Socialista e Izquierda Unida, el PP levanta la bandera de proyectos serios, de los resultados de siete años de gestión, del trabajo y el esfuerzo realizado y de haber convertido a España en un país "más próspero" y "mejor" mientras otros siguen atacando las sedes de su partido.

Que pongan algunos las injurias, que nosotros bajamos los impuestos; que pongan algunos los acosos, que nosotros garantizamos la pensiones; que pongan las piedras, que nosotros queremos que los españoles puedan seguir teniendo trabajo; que pongan algunos las agresiones, que nosotros responderemos con la convicción de una España serena, pacífica y próspera", añadió.

EXPULSAR A LOS AGRESORES

Aznar agradeció a José Luis Rodríguez Zapatero su solidaridad por los daños causados en las sedes del PP pero l considera insuficiente. Cree que el secretario general del PSOE debería "condenar" los ataques y "quitar de sus filas" a los que han destrozado bienes materiales y han agredido a dirigentes de la formación que sustenta al Ejecutivo. El mismo argumento lo utilizó también para el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares.

A su juicio, ambos líderes están "tan unidos" en la crisis de Iraq que "no se distinguen sus posiciones". "Antes podían verse matices entre los compañeros de pancarta". "Ahora, lossocialistas se han encadenado a los comunistas y, para sorpresa de algunos, la llave del candado la han perdido o la han tirado". "Es tan grande la irresponsabilidad que nadie defiende esa postura", agregó.

El presidente del Gobierno afirmó que la posición de Zapatero y Llamazares supone un peligro "grave" y es "un riesgo nefasto y funesto para los intereses de España", por lo que confió en que los ciudadanos nunca le den la oportunidad de llegar a La Moncloa. "Han decido llegar al poder al precio quesea, pagar el precio del aislamiento internacional, el precio de la inseguridad, el precio de sembrar vientos que luego terminan en tempestades, el precio de manifestarse contra el PP y de tirar piedras contra las sedes", dijo.

Acusó a la oposición de querer dejar al país en una situación de aislamiento internacional o en un neutralismo equidistante entre "la democracia y los tiranos, entre la irracionalidd y la moral". Ratificó su apoyo a George W. Bush y a su "amigo" Tony Blair, líder de uno de los artidos más importantes de la Internacional Socialista, a los que se han unido países que hace unas décadas estuvieron "pegados a la bota comunista", como Hungria, Bulgaria y Polonia.

Mientras los gobiernos de Alemania y Francia rectifican parcialmente su posición inicial, señaló que Rodríguez Zapatero "ya no tienen ningún punto de referencia". Aznar rechazó un papel neutral para España en la Comunidad Internacional y se negó a a vivir "arrodillados bajo el chantaje de tiranos que ayudan a grupos terrristas o tienen armas de destrucción masiva".

"España necesita, quiere y debe tener aliados, aliados sólidos, firmes, en los cuales va a poder confiar y que puedan confiar en nosotros para prestar buenos servicios a la paz, a la seguridad y la tranquilidad del mundo. Esa es nuestra convicción, es nuestra oportunidad, esos son los principios que defendemos", manifestó.

APOYO A LAS VICTIMAS

Por último, el "número uno" del PP declaró su "horror y estremecimiento" por las víctimas de la guerra de Iaq. Mostró su alegría por que el principal "beneficiario" de la intervención bélica serán los ciudadanos iraquíes pero recriminó a algunos partidos políticos que no expresen su tristeza por las víctimas del terrorismo con la misma intensidad que lo hacen ahora por los damnificados en el Golfo Pérsico. "Qué fácil es colgarse un cartel en la solapa cuando las víctimas están en Iraq, qué fácil es colgarse un cartel en la solapa cuando están en Kosovo y qué fácil es no ponérselo cuando las víctimas están en Esaña".

Aznar estuvo acompañado en el acto por el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy; el presidente de la Xunta, Manuel Fraga; el ministro de Administraciones Públicas y secretario general del PP, Javier Arenas; la ministra de Sanidad, Ana Pastor; el secretario general del PP de Galicia, Jesús Palmou; los coordinadores nacionales del PP Pío García-Escudero, Ana Mato y Rafael Hernando; además de un gran número de diputados y dirigentes del PP de Aragón, Castilla y León y Madrid.

Era l primer gran acto público organizado por el PP desde el comienzo de la guerra en Iraq. Justo antes de la intervención del presidente, se mostró un vídeo resumen de los ataques que han sufrido las sedes y los dirigentes populares en el último mes. Los cerca de 10.000 asistentes al acto pitaron al coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, y al secretario de Organización del PSOE, José Blanco, cuando éstos aparecían en las imágenes.

(SERVIMEDIA)
05 Abr 2003
PAI