INMIGRANTES. MAYOR OREJA RECONOCE EN EL CONGRESO QUE LA OPERACION DE EXPULSION NO FUE "MODELICA" Y GENERO ALARMA SOCIAL
- Dice que la decisión de suministrar haloperidol no partió del ministerio sino de los responsables policiales de la operación
- Insiste en que su departamentó actuó en este caso respetando la legalidad y los métodos habituales
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El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, reconoció hoy que la expulsón de 103 inmigrantes ilegales de Melilla ocurrida a finales del pasado mes de junio no fue una "operación modélica" y admitió que las circunstancias que rodearon este proceso han generado una situación de grave alarma social.
Mayor Oreja aseguró no obstante que su departamento actuó en este caso respetando los métodos habituales y ajustándose a los preceptos legales, sin dictar ninguna orden nueva respecto a la forma en que los funcionarios policiales debían atajar posibles desórdenes originados por os africanos.
En este sentido, puso de relieve que las únicas decisiones políticas de su departamento fueron las de acelerar la operación de expulsión y elegir los países más idóneos para la acogida de los inmigrantes.
El responsable de la cartera de Interior compareció esta tarde en el Congreso para dar cuenta de las conclusiones de una investigación realizada por la Dirección General de la Policía acerca de la polémica expulsión de más de un centenar de inmigrantes ilegales de Melilla el pasado24 de junio.
Mayor Oreja confesó que en la operación se utilizó el sedante haloperidol diluido en agua "ante la agresividad y la alteración nerviosa de los inmigrantes" y rechazó que se omitiera la prescripción de vacunación obligatoria a los funcionarios que participaron en el dispositivo.
A este respecto, comentó que el policía Juan Enrique del Moral, aquejado de paludismo en un hospital de Granada, se encuentra ya fuera de peligro y se podrá reintegrar a su trabajo sin que su enfermedad le dej secuelas.
Durante su comparecencia en el Congreso, el ministro hizo un pormenorizado relato de los hechos que motivaron las expulsiones y subrayó que en todos los casos se dispensó asistencia letrada a los inmigrantes, setenta de los cuales tenían pendiente una resolución o notificación de expulsión, mientras que los 33 restantes habían entrado ilegalmente en España.
CINCO EXPEDICIONES
Mayor Oreja explicó que los 103 inmigrantes fueron embarcados en 5 aviones militares, 3 de los cuales tenían omo destino Guinea Bissau (con una parada en Senegal), 1 partió para Malí y el restante, a Camerún.
El ministro, que detalló la composición de cada uno de estos vuelos y las nacionalidades de los inmigrantes que viajaban en ellos, dijo que fueron elegidos países del área francófona que, como el caso de Senegal, presentan un cierto nivel de bienestar y las suficientes garantías democráticas, al igual que Guinea Bissau, que es un país "hospitalario" y "pacífico". Igualmente, indicó que se descartaron pases como Liberia y Ruanda porque se encuentran en guerra.
En su exposición, Mayor Oreja prestó especial atención a la polémica originada por el uso del fármaco haloperidol durante la operación de repatriación, decisión que, según dijo, no partió de las autoridades de su ministerio, sino que fue tomada los responsables policiales del dispositivo, aunque contó con el total apoyo de Interior.
Justificó la administración de este sedante por la "grave situación de agresividad y alteración nerviosa" enque se encontraban los ciudadanos subsaharianos en el avión, y ante el riesgo de que estos altercados pudieran poner en peligro su vida y la de los demás ocupantes de las aeronaves.
Mayor Oreja señaló que el fármaco fue empleado en dos de los cinco vuelos "y no de un modo masivo", porque sólo fue utilizado en dos expediciones de Senegal (en una de ellas se suministró en 3 botellas de litro y medio de agua, y en otra se pusieron diez gotas en otras tres botellas).
Sobre este punto, el ministro neg que los policías hubieran drogado o narcotizado a los inmigrantes y quiso dejar claro que el haloperidol es una especialidad farmacéutica autorizada, que incluso se recomienda para casos de niños hiperactivos, a modo de calmante.
(SERVIMEDIA)
29 Jul 1996
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