La peruana Adela Príncipe pertenece a la Asociación Mikaela Bastidas, que agrupa a mujeres de las comunidades Quechua y Aymara de los Andes.

Esta organización intenta denunciar en España la celebración del V Centenario, por considerar que "hay poco que celebrar", y la precaria situación por la que atraviesa la comunidad indígena, "como consecuencia d la labor realizada en el poder por los criollos".

Príncipe señaló que esos pueblos tienen que agradecer algunas cosas a los colonizadores, pero añadió que "tenemos que ponernos de luto por otras, por la sangría y la matanza de millones y millones de personas. La situación no ha cambiado".

A su juicio, los indígenas "han sido traicinados por los criollos y somos carne de cañón. Nadie se salva, siempre son los mismos descendientes de Pizarro, Hernán Cortes y sus sucesores".

"No es ninguna cos decorosa", agregó, "celebrar con bombo y platillo una feria donde los grandes van a exponer su riqueza. Y después seguro que seguirá la matanza de indígenas".

Sobre la política que desarrolla el Gobierno español al respecto, dijo que "está dando mucho dinero a los criollos" y matizó que si "está al corriente de lo que ocurre allí, es cómplice de lo que pasa".

Adela Príncipe acusó a Alberto Fujimori, que la próxima semana visita España, de representar el "colonialismo japonés" y criticó a las autridades peruanas por maltratar a la comunidad india y sumirla en la pobreza.

CRITICAS A LA IGLESIA

Tras reivindicar la vuelta a sus culturas y tierras, criticó la labor realizada por la iglesia y el machismo que predomina en los Estados iberoamericanos

La Asociación Mikaela Bastidas participa en la campaña "500 años de resistencia", que al igual que la denominada "desenmascaremos el 92" intenta denunciar los actos del V Centenario, ya que creen que intenta convertir a España "en escaparate mundal del nuevo modelo del capitalismo avanzado".

"Desenmascaremos el 92", integrado por colectivos ecologistas, anarquistas, culturales y sociales, tiene previsto realizar diversos actos de protesta durante 1992 en Granada, Sevilla, Madrid, Barcelona y Vitoria.

Sus promotores insisten en que el Gobierno español pretende ocultar "la dramática situación iberoamericana, tanto en la miseria social, el hambre, los enormes desastres ecológicos o ante el sistemático pisoteo de las comunidades indias".

Además, mantienen que una importante cantidad de fondos públicos "están siendo derrochados por los responsables, gestores y funcionarios del V Centenario y la Expo-92".

Junto a la dimisión de Luis Yáñez, "como cabeza visible y responsable de esta política", solicitan la de Antonio Pérez, responsable de los Temas Indios del V Centenario.