INCENDIO LICEO. SOBRE EL TEATRO ECAIA UNA MALDICION POR HABER SIDO CONSTRUIDO EN UN CONVENTO, SEGUN LA LEYENDA
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El incendio que hoy destruyó el Gran Teatro del Liceo de Barcelona parece dar cumplida respuesta a una profecía popular de finales del siglo XIX, que aseguraba que el edificio sufriría tres grandes siniestros, el último de los cuales consistiría en su derrumbamiento, al haber sido construido sobre un convento.
Las dos anteriores profecías, que vaticinaban un gran incendio y otra desgraca a causa de una bomba, también se cumplieron a finales del siglo pasado.
El escritor Joan Amades, que recogió la mayoría de leyendas populares catalanas de los últimos siglos, asegura en su obra que la primera profecía divulgada por la imaginación de los barceloneses se cumplió el 9 de abril de 1861, cuando se incendió por primera vez el teatro.
Fue a partir de aquel año, según el historiador Amades, cuando comenzaron a correr las voces: aquel siniestro daba a entender que se trataba de un castio divino por haber convertido el convento de los Trinitarios de la Rambla de Barcelona en un teatro. El Liceo fue inaugurado el 4 de abril de 1847.
En los días posteriores a la tragedia los comentarios populares afirmaban que entre las cenizas del incendio de 1861 se encontró un papel en el que había escrito: "Soy un búho y estoy solo. Si volvéis a levantarlo yo volveré a quemarlo".
La segunda profecía se materializó 32 años más tarde. El anarquista Santiago Salvador Franch lanzó dos bombas desdeel quinto piso de la platea del teatro la noche del 7 de noviembre de 1893. A consecuencia del atentado murieron 20 personas y otras 50 resultaron heridas.
Hoy, cuando sólo faltaba menos de dos temporadas de representaciones de ópera para cumplirse el 150 aniversario del Gran Teatro del Liceo, ha llegado a hundirse el techo del edificio, como predecía la leyenda popular.
El teatro fue construido gracias a las aportaciones de la clase burguesa de la época, que representó el crecimiento de la indusria catalana. Era el escenario de ópera más importante de Europa después de la Scala de Milán (Italia) y se convirtió en un lugar de encuentro de aquel sector social. Muchas de sus lonjas conservaban todavía, antes del incendio que esta mañana asoló el edificio, muebles centenarios.
(SERVIMEDIA)
31 Ene 1994
C