Este privilegio de los empleados de Iberia se hace extensivo a todos sus familiares de primer grado, es decir, esposas e hijos, lo que, a una media de un sólo hijo por trabajador, la empresa podría estar soportando, al menos, 72.000 billetes gratuitos, dado que la plantilla de la empresa es de 24.000 personas.

Tanto fuentes de la dirección de la empresa como de los sindicatos han reconocido a Servimedia la existencia de estas "ayudas" para volar en Iberia que tienen sus empleados, aunque advierten que estan limitadas.

De entrada, entre el colectivo de tierra, excepto los llamados TGS's (técnicos de grado superior), sólo se pueden realizar tres vuelos gratis cada tres años, con reserva y en clase turista, algo de lo que disfruta el 80 por cien de la plantilla, esposas e hijos.

Para el resto de las ocasones que deseen volar, estos trabajadores y sus familias sólo podrán hacerlo, siempre que quieran, con un 10 por cien de descuento y sin reserva, por lo que deben acoplarse a las vacantes de vuelos existentes, o con un descuento del 50 por cien, siempre que no sea ni Verano, ni Navidades, ni Semana Santa.

Los TGS's y los pilotos tienen exactamente los mismos derechos, pero con la difenrencia de que elevan la categoría de su desplazamiento desde la clase turista a la preferente. Además, los responsable de los mandos de los aviones pueden proporcionar billetes a sus familiares en las épocas restrictivas si se encuentran desplazados fuera de su lugar de domicilio por el ejercicio de su profesión.

Fuera de la compañía, aseguran las fuentes consultadas, nadie tiene derecho a viajes gratis o con descuento, salvo convenios de la empresa con otros organismos o compañías en los que los billetes se emplean como "moneda de cambio" para pagar servicios concretos contratados por Iberia.

Así, existen persoas en España, como diputados o políticos, que pueden viajar en Iberia sin pagar el billete de su bolsillo, ya que es el organimso, partido empresa para la que trabajan los encargados de liquidar su importe con la compañía.

El caso más conocido es el de los diputados y senadores, que cuentan con un talonario extendido por sus respectivas cámaras, que les permite viajar gratis cada semana a sus respectivas circunscripciones, a cuenta del presupuesto de la Cortes, pero el importe de los billetes es cobrao por Iberia.

La única excepción la constituyen los presidentes de las compañías aéreas agrupadas en la IATA, que pueden acogerse a un convenio por el que vuelan gratis en cualquiera de las más de 60 compañías que forman la organización.