Según informó Iberdrola, el contrato prevé el suministro de energía durante 10 años a través de plantas fotovoltaicas. Permitirá abastecer a Tosano con parte de la producción de su propio sistema fotovoltaico, para un consumo anual estimado de 20 gigavatios hora (GWh), contribuyendo así a aumentar la seguridad energética de la compañía, la independencia energética y acelerar su camino hacia la descarbonización.

Con la inauguración de su segunda planta operativa y la finalización de 4 plantas ya autorizadas y en construcción, Iberdrola contará con una capacidad operativa de 400 megavatios (MW) en Italia en 2025. Iberdrola cuenta con una dilatada experiencia en el ámbito de los PPAs y gestiona acuerdos de compraventa de energía a largo plazo en mercados como España, el Reino Unido, Estados Unidos, México y Australia, procedentes de proyectos eólicos terrestres y fotovoltaicos.