El cadáver de la joven fue hallado por un conductor que detuvo su automóvil en un arcén de la vía, en el kilómetro 15 de la carretera que va de Manresa a Igualada, y se aproximó a una zona boscosa.

El cuerpo de Juana Garrucho se encontraba en avanzado estado de descomposición, motivo por el que su identificació exacta no podrá realizarse hasta que no se le practique la autopsia, prevista para mañana. Sin embargo, diferentes indicios apuntan a que el cuerpo de la mujer, en el que no se pueden apreciar señales de violencia, es el de la cajera desaparecida.

Tras conocerse el hallazgo del cuerpo se desplazaron hasta el lugar efectivos de la Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía de Manresa y Brigada de Homicidios de Barcelona.

Juana Garrucho desapareció en la madrugada del pasado día 5 de diciembre, cuado se disponía a ingresar la recaudación del día del establecimiento (700.000 pesetas) en un cajero automático del Banco de Sabadell, a unos 150 metros del local.

La joven ocupaba tareas de responsabilidad en el McDonalds de Manresa y se encargaba de realizar el ingreso de la recaudación cada día al cerrar el establecimiento.

La Policía descartó que se tratara de una fuga premeditada o un secuestro después de los resultados negativos de una batida popular realizada en Manresa y sus alrededores do semanas después de que desapareciera.