En el caso de estas últimas, aseguran que la remisión a Rajoy se produjo hace "varios días", es decir, antes de la nueva polémica PSOE-PP por la composición de la comisión bilateral que estudiará esas reformas constitucionales y de los estatutos de autonomía.

El texto pide al Consejo de Estado informe sobre las modificaciones legales necesarias, incluidas las constitucionales, a que den lugar los cuatro cambios en la Carta magna: mención a la Constitución Europea, igualdad en el acceso al trono entre hombre y mujer, reforma del Senado y denominación de las comunidades autónomas.

Las fuentes consultadas admiten que será la reforma de la Cámara Alta, en concreto cómo quedará el reparto provincial de escaños tras esa reforma, lo más complicado de pactar porque supone reorganizar el reparto de poder. Alguien ganará y alguien perderá en ese reparto.

No obstante, el Ejecutivo y el PSOE confían en que, finalmente, el PP se sume a esta reforma constitucional y sobrepase su actual oposición al proceso. Ayer, Mariano Rajoy dio verbalmente por zanjada la comisión que pactó con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su cita del 14 de enero pasado en La Moncloa.

Hoy, el secretario general del PP, Angel Acebes, lo ha hecho a través de una carta remitida al secretario de Organización del PSOE, José Blanco. Según informaron a Servimedia fuentes populares, Acebes recrimina a Blanco que varios dirigentes socialistas hayan minimizado el acuerdo alcanzado hace mes y medio en el Palacio de La Moncloa por los máximos dirigentes de PP y PSOE.

Acebes constata que no hay compromiso ni interés en el Partido Socialista por poner en marcha una comisión de "alto nivel" como la que públicamente ha reivindicado Mariano Rajoy desde su comparecencia en La Moncloa el 14 de enero.

El secretario general del PP resalta que su partido ha respondido con prudencia a las declaraciones de diversos dirigentes socialistas, ya que pretende defender la convivencia, solidaridad, igualdad y cohesión entre españoles.

"GENTE QUE TRABAJE"

Frente a esta tesis, las fuentes gubernamentales consultadas por Servimedia sostienen que fue Rajoy en sus distintas visitas a La Moncloa de pasados meses, unas conocidas y otra no, el que quería inicialmente una comisión de "bajo nivel". Fuentes populares reducen esos contactos a "uno" en La Moncloa con la vicepresidenta primera.

El argumento de Rajoy, aseguran desde el Gobierno, era que "aquí tiene que venir gente que trabaje", recordando la comisión que él mismo y Alberto Ruiz Gallardón, y Txiki Benegas, por parte del PSOE, formaron en 1992 y que luego permitiría la reforma de los estatutos de autonomía amparados en el artículo 142 de la Constitución.

Por eso, los socialistas se extrañan del giro que ha dado el PP hasta rechazar la comisión que pactaron el 14 de enero Zapatero y Rajoy para reformar Constitución y estatutos de autonomía.

La formalización de esa comisión quedó paralizada, en principio, por la inminencia del referéndum de la Constitución Europea, ya que ambos partidos estaban volcados en esa campaña. Sin embargo, más de una semana después de ese referéndum, ninguno de los dos partidos considera probable que la comisión se reúna en los próximos días.

Los contactos quedaron desde el principio en manos del secretario de Organización del PSOE, José Blanco, y del secretario general del PP, Angel Acebes, pero ningún avance se ha registrado desde que los socialistas enviaron a los populares la lista de sus delegados en esa comisión, el pasado viernes. Hoy, Acebes ha respondido por carta que rechazan esa composición.

El PSOE da toda legitimidad a esos tres delegados para representar al partido en la comisión, ya que son los máximos responsables en los asuntos a abordar. Se trata de Diego López Garrido, catedrático de Derecho Constitucional; Alfonso Perales, secretario de Política Autonómica; e Inmaculada Rodríguez Piñero, responsable de Política Económica.

ZAPLANA: "ES UN INSULTO A LA INTELIGENCIA"

El PP dice, sin embargo, que esos nombres son una demostración de que el PSOE da un perfil bajo a esa comisión y el propio Eduardo Zaplana ha llegado a decir que esa delegación "no está a la altura" de lo que se propone desde su partido, y que es "un insulto a la inteligencia de la gente".

Desde el Gobierno se ha apuntado la posibilidad de que el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, o el secretario de Estado de Política Territorial lleguen a formar parte de esa comisión, pero el Ejecutivo elude pronunciarse sobre los representantes de cada partido.