Esta situación ha provocado que el sector ganadero, junto al ayuntamiento de la localidad de Almonte, esté buscando en la actualidad una nueva ubicación en las proximidades de Doñana para que dichos animales puedan pastar.

Aunque en un principio el Ayuntamiento almonteño está dispuesto a cder a los ganaderos citados la finca "El Ojillo", al objeto de que los animales puedan abandonar "Las Marismillas" y "Las Nuevas", en las que se encuentran en la actualidad, el vicepresidente de la Asociación de Criadores de Ganado de esta localidad piensa que en esta posible nueva finca el ganado también contaría con insuficiente pasto.

El ganado almonteño fue introducido hace años a la fuerza en el Parque Nacional por parte de sus propietarios, después de que la dirección de la reserva desestimase ete acceso al entender que podría ser perjudicial para la preservación de la flora y fauna de la reserva.

El miembro del patronato de Doñana, Jesús Vozmediano, ha denunciado en retiradas ocasiones que la situación del coto, a causa de la carencia de agua, es "prácticamente insostenible".