GAL. LOPEZ ARANGUREN SUAVIZA SUS DECLARACIONES PERO REAFIRMA QUE "SE COMPRENDE" QUE SURGIERAN LOS GAL
- "Esa lucha no era tan disparate como pudiea parecer".
- "Era una utopía terminar con las atrocidades de ETA y por eso es por lo que muchos vascos tomaron una decisión".
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El catedrático emérito de Etica José Luis López Aranguren suavizó hoy las declaraciones realizadas en los cursos de verano de Maspalomas (Las Palmas de Gran Canaria), en las que afirmó que "en 1983, el GAL era la única forma de luchar contra ETA", pero insistió en que en aquella época "se comprende" que se fomarán los GAL, aunque no fuera justificable éticamente.
López Aranguren manifestó en San Lorenzo de El Escorial, después de la lectura de un comunicado de rectificación, que "se comprende, no digo que se justifique de ninguna manera, ni ética y jurídicamente, que se montase el GAL para hacer otro tanto".
El catedrático, que participó hoy en el seminario de la Universidad Complutense "Fin de siglo: ¿Fin de la utopía?" dijo que en 1983 "era una utopía terminar con las atrocidades de ETA, que en alt grado siguen comentiendo, sin tomar alguna determinación y eso es lo que muchos de los vascos que naturalmente no estaban de acuerdo con esas atrocidades, hicieron y tomaron esa decisión".
José Luis López Aranguren explicó que "en aquella época, yo vivía en San Sebastián, y me sentía completamente vasco; naturalmente yo estaba en contra de eso que se llamó GAL, pero he tratado de entenderlo y de explicarlo y esa lucha no era tan disparate como pudiera parecer".
Como residente en el País Vasco, Lpez Aranguren percibió entonces que "la mayor parte de esos miembros de ETA que comentían los crímenes vivían en Francia, pasaban a España estrictamente a cometer ese crimen e inmediatamente regresaban a Francia".
Añadió que "la relación entre los gobiernos de España y Francia no era buena y no había posibilidad legal de castigar tales crímenes. Así se comprende, no digo que se justifique, que se montase esta organización de los GAL, para hacer lo que no se podía lograr de una manera correcta y ética"
DERECHOS HUMANOS
López Aranguren pidió a Javier Muguerza, catedrático de ética y director del curso, que leyera públicamente su comunicado, que prefirió escuchar en silencio a su lado. Este es el texto íntegro del comunicado:
"Queridas amigas, queridos amigos:
Durante mucho tiempo he dicho que sabiéndome viejo no me sentía viejo, pero desde hace ya algún tiempo he de decir no sólo que me sé viejo sino que me siento viejo. He perdido memoria, he perdido creatividad, he perdido no pocas de is antiguas facultades pero, afortunadamente para mí, no lo he perdido todo todavía.
No he perdido, por ejemplo, mi deseo de comunicarme con la gente. No he perdido tampoco mi pasión por la libertad y, desde luego, no he perdido mi afán de luchar en defensa de los derechos humanos.
Por eso, me ha apenado profundamente verme aparecer en los medios de comunicación como un posible legitimador de procedimientos, llámaseles como se les quiera llamar, que atentan de raiz contra dichos derechos.
Noquiero desmentir a nadie a este respecto ni entrar en polémicas ociosas. Tengo la mayor consideración hacia los profesionales de aquellos medios de comunicación y, a la recíproca, siempre me he sentido tratado con consideración y afecto por los mismos.
No diré pues que mis palabras han sido objeto de tergiversación o manipulación alguna, pero sí creo poder decir que ha habido un malentendido, al que quizás no haya sido ajena una cierta dificultad por mi parte para hacerme entender correctamente, y me iento obligado por lo tanto a poner de mi parte cuanto pueda para deshacer ese malentendido.
Tendré que recordar a estas alturas que fui en su día el prologuista del admirable libro de los señores Miralles y Arqués en que por primera vez se denunciaba lo que pasaría a llamarse con el tiempo la trama de los GAL.
Entonces, como ahora, me mostraba y me muestro convencido de que una buena parte de nuestra sociedad comprendía y se explicaba la reacción del Estado ante la violencia terrorista, pero nuna se me ocurrió ni se me ocurre ahora pensar que sea admisible éticamente confundir semejante comprensión o explicación con la justificación de algo tan injustificable como el ejercicio de la violencia estatal al margen de la ley.
¿ Podría acusarme alguien que haya leido mis textos sobre la dramática relación entre ética y política de haber antepuesto alguna vez las exigencias del poder del Estado a los imperativos de la moral?
Lamento de veras la confusión que se ha creado en torno a mis palabra de días atrás. Si ha habido torpeza por mi parte al expresarme no tengo el menor empacho en presentar a todos mis excusas pues rectificar no es de sabios, sino sencillamente de hombres.
Si ha habido torpeza por parte de quienes interpretaron mal esas palabras, la excuso a mi vez sin la menor reserva y, por supuesto, sin el menor asomo de rencor. Y como siempre, brindo a todos la amistad de este su viejo amigo, que a pesar de todos los pesares sigue creyendo que sólo la buena voluntad de los seres humnos conseguirá algún día la erradicación de la violencia de este mundo. Un objetivo utópico, para decirlo con el lema del seminario en el que estoy participando en esta universidad, pero por el que merece la pena luchar sin desmayo, si es que puede decirse todavía que merece la pena vivir con dignidad.
José Luis Aranguren. Universidad Complutense. Cursos de Verano. 11 de agosto de 1995."
(SERVIMEDIA)
11 Ago 1995
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