Desde el año pasado, el departamento que dirige Magdalena Álvarez emplea un nuevo estándar de reutilización de residuos, que consiste en la excavación de mezclas asfálticas envejecidas y en el relleno posterior de la zona con mezclas especiales en caliente, fabricadas con el mismo material extraído de la carretera y al que se añade terreno árido virgen, betún nuevo y productos que rejuvenecen la superficie de la vía.

Aunque en España se vienen realizando obras de reciclado con cierta frecuencia, la singularidad de este sistema, según informó hoy Fomento, son las ventajas que reporta con respecto a las técnicas empleadas hasta la fecha.

En primer lugar, para la fabricación de nuevas mezclas se utiliza un 50% de material reciclado, frente a las tasas del 15% o 30% empleadas con las técnicas anteriores.

Por otra parte, la calidad, homogeneidad y capacidad resistente de las capas de asfalto recicladas en caliente son superiores a las obtenidas mediante las técnicas en frío, en las que el material se machaca en el lugar de la obra y se trata con productos especiales para permitir su permanencia en la carretera.

Además, las mezclas recicladas en caliente tienen unas características físicas idénticas a cualquier otro tipo de mezcla y evitan llevar al vertedero un material muy valioso, reduciendo así la extracción de áridos y el consumo de productos petrolíferos. De esta forma, se protege el medio ambiente y se ahorran recursos estatales.

En concreto, el Ministerio de Fomento está aplicando este nuevo sistema en la obra de rehabilitación del firme de la Autovía de Andalucía (A-4) entre los puntos kilométricos 566 y 572, en el término municipal de Puerto Lumbreras. Anteriormente se utilizó en el tramo Viella-Frontera francesa de la carretera N-230 en Cataluña.