FIESTA NACIONAL. LOS CUERPOS DE ELITE DEL EJERCITO COMBATEN LA LLUVIA CON CANTOS PATRIOTICOS Y DE EXALTACION DE LA VIRILIDAD

MADRID
SERVIMEDIA

Diversos Cerpos de Elite del Ejército español combatieron la lluvia que cayó sobre Madrid en las horas previas al comienzo del desfile militar del Día de la Hispanidad entonando cantos patrióticos y de exaltación de la virilidad.

Mientras permanecían "acantonados" en los alrededores del madrileño Paseo de la Castellana, los soldados entonaban todo lo que se pudiera cantar, desde los valores patrióticos y castrenses propios del himno de cada brigada hasta la exaltación de la masculinidad con gritos como "maricónel que no bote". Todo servía para pasar el rato y combatir la incesante lluvia.

Resguardados bajo algún que otro puente elevado que cruzaba La Castellana, y atentamente observados por curiosos peatones, soldados y cuadros de mando daban los últimos retoques a los preparativos del desfile, mientras miraban con resignación hacia el cielo encapotado.

Con los carros de combate apostados en el Paseo de la Castellana y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado velando en los alrededores por la corrcta celebración del desfile, los instrumentos de las distintas bandas de música invitaban a los paseantes a detenerse.

Con la sonrisa en la boca, y entre comentarios de amigos o familiares, grupos de ciudadanos aprovechaban los cortes de tráfico para pararse en mitad de la calzada bajo un paraguas y escuchar, por ejemplo, el himno de la Brigada Paracaidista.

A pocos metros, y de forma casi simultánea, los miembros del Cuerpo de Operaciones Especiales (COES) desataban la carcajada de los paseantesentonando, de forma irónica y muy gráfica, cómo "se le quita la ropita" a una mujer, una vez que se ha conseguido "meterla en la camita".

Mientras, pequeños grupos de militares se desmarcaban de los preparativos del desfile y buscaban por la zona algún bar abierto que les pudiera servir un café caliente o donde pudieran comprar un paquete de tabaco.

Las peticiones de orientación de los soldados eran aprovechadas en muchas ocasiones por los peatones, que ofrecían sus indicaciones después de conoce algo más de cerca a las Fuerzas Armadas.

(SERVIMEDIA)
12 Oct 1999
CLC