(ESTA NOTICIA AMPLIA Y SUSTITUYE LA NUMERO 34DE HOY) ----------------------------------------------------
-18 de enero de 1988. El teniente coronel Quintero investiga a los guardias de la comandancia de Pamplona Juan José Serón Rueda y Juan García Macías por tráfico de drogas. Al no dar resultado, ordena a sus subordinados que introduzacn cerca de 200 gramos de hachís en el vehículo y domicilio de los agentes, que fueron expedientados por estos hechos. Participaron el cabo Molina y los guardias Nieto, López Segura y Gómez Poras.
-15 de diciembre de 1988. El capitán Maquez ordena a Molina, Domínguez y López Segura que introduzcan de forma ilícita 140 gramos de heroína y un revólver en el domicilio en la calle Balandros de Madrid de Juan Antonio Carrasco, pequeño traficante que escapó de una persecución. El inmueble fue posteriormente registrado por orden judicial y el traficante fue condenado a 5 años de prisión.
-1 de marzo de 1989. El capitán Márquez, los cabos Molina y Cifuentes y Juan Carlos Vega ocultan el hallago de 400 gramos de cocaína en el domicilio, en la calle Cochabamba de Madrid, de la traficante Ana María Rodríguez Parfay, confidente de la policía, y deja escapar al traficante Julio César.
-20 de abril de 1989. El cabo Molina y los guardias Márquez, Domínguez, López Segura y Vega se apoderan de 2.200 gramos de cocaína y 2 pistolas en un registro en la calle Granada de Madrid sin hacerlo constar en el acta de entrada para quedarse con la sustancia.
-14 de noviembre de 1989. El teniente coronel uintero planea una entrega controlada junto a un confidente de la GIFA de Valencia al que pagan, sin especificarlo en el atestado, con los dos kilos de heroína intervenidos a un traficante "motivando la introducción en el mercado del tráfico ilícito de esta sustancia". Intervienen en la operación el capitán Márquez y los guardias Alcoba, Gómez Porras y Ortega.
-4 de mayo de 1990. Gómez Porras, por orden de Quintero, separa 5 kilos de cocaína de un alijo de 30 kilos incautados por la UCIFA en un hotel e Lloret de Mar (Gerona). Luego, paga con un kilo de sustancia a los "hermanos Dalton", que habían preparado la operación desde Bolivia.
-29 de septiembre de 1990. Gómez Porras, en presencia de Cifuentes y Montoya y con conocimiento del sargento Méndez y de Quintero, paga a los confidentes Ezquerecocha y de Temple con 100 gramos de heroína procedentes de un alijo de 2.100 gramos incautado en Puebla de Almuradiel (Toledo). Ezquerecocha vendió la sustancia al traficante Garrote Gago por 80.000 pesetas. -Diciembre de 1990. El comandante Pindado prepara con los "hermanos Dalton" una entrega controlada de 93 kilos de cocaína importada desde Colombia por la que extiende un cheque de 120 millones de pesetas. Autoriza la entrada de 10 kilos que entraron en el mercado y guarda para sí un kilo de sustancia. Participaron en la operación Gómez Porras, Domínguez, el sargento Méndez y el cabo Molina. Los confidentes cobraron 10 kilos de droga, dos de ellos procedentes del alijo de Lloret de Mar que vendieron portres millones de pesetas a Garrote, a través de Temple, Fernández Barbudo y Pallol. No hubo detenciones.
-Marzo de 1991. Pindado planea con de Temple y Ezquerecocha una nueva entrada de 10 kilos de cocaína desde Colombia, que fue entregada en el hotel Liebany de Madrid. Dos kilos fueron entregados a los confidentes para introducirlos en el mercado y otros 500 gramos fueron aportados como pago a confidentes. Participaron Gómez Porras y Domínguez.
-Abril de 1991. El comandante Pindado organiza la etrega controlada de 30 kilos de cocaína desde Colombia con de Temple, que percibe 3 kilos por esta operación con conocimiento del capitán Núñez y el sargento Ménedez. La droga fue desviada al tráfico de estupefacientes con la intervención de Gómez Porras y Domínguez, que cobraron 4 de los 10 millones obtenido en la venta.
-5 de junio de 1991. El guardia Domínguez es detenido por el propio comandante Pindado, después de que el coronel Ayuso le encargara investigar las irregularidades detectadas en las peraciones descritas. Pindado falseó con el capitán Núñez el expediente incoado y Domínguez fue puesto en libertad.
-19 de marzo de 1990. Quintero organiza con un confidente conocido como "Andreu" una operación en Sevilla con 3 kilos de heroína en la que intervienen el cabo Cifuentes y Juan Carlos Vega. La operación no se llegó a realizar y el jefe del grupo antidroga de Sevilla, el capitán David Cordero, falsea el atestado indicando que la droga había sido descubierta en la nacional IV con el fin de ar salida legal a la sustancia y encubrir al colaborador.
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El juez Baltasar Garzón dictó hoy auto de procesamiento contra 14 miembros de la Unidad de Investigación Fiscal y Antidroga (UCIFA) de la Guardia Civil y otras 9 personas por diversos delitos de tráfico de estupefacientes, contrabando, prevaricación, falsedad y detención ilegal por las irregularidades detectadas en el sen de la unidad entre 1988 y 1991.
Entre los procesados figuran el teniente coronel Francisco Quintero, el comandante José Ramón Pindado, los capitanes Sebastián Márquez y Jesús Narciso Núñez, asi como los guardias "arrepentidos" Doroteo Gómez Porras y Vicente Domínguez, cuyas declaraciones en el juzgado provocaron el inicio de las investigaciones del uso de droga para el pago a confidentes.
Asimismo, se encuentran encausados los sargentos Gonzalo Méndez y Manuel Jiménez, los cabos Félix Molina, Naario Cifuentes y Vicente Montoya; los guardias Antonio López Segura, Pedro Nieto y Juan Carlos Vega; los confidentes José Luis Recuero y José Manuel García (conocidos como los "hermanos Dalton"), Ramón de Temple y Luis Ezquerecocha, y los traficantes Juan Pallol, Ricardo Fernández Barbudo, Juan Miguel Rada, Miguel Cobos y Juan José Garrote.
Sin embargo, Garzón ha exonerado de toda responsabilidad a los coroneles Arsenio Ayuso y Rafael Garabito, máximos responsables de la UCIFA entre enero de 1988 y abil de 1991, fecha en la que los procesados cometieron las supuestas irregularidades "primero de forma aislada y esporádica y luego sistemática y constante (...), aprovechando aquel ámbito competencial y la cualidad de funcionarios públicos con la que han actuado", según consta en el auto notificado hoy a las partes.
De acuerdo con el escrito, los procesados están involucrados en un total de 12 operaciones irregulares que se desarrollaron en dos fases "perfectamente diferenciadas". La primera correspone al tiempo en que el coronel Ayuso estuvo al frente de la unidad, momento en el que el teniente coronel Quintero aprovechaba sus ausencias para ordenar la comisión de los delitos.
Entre éstos, figuran el desvío de 5 kilos de cocaína procedentes de un alijo de 30 kilos aprehendido por la UCIFA en Lloret de Mar (Gerona), la "colocación" de 200 gramos de heroína en el domicilio de dos guardias civiles de Pamplona que fueron expedientados por este motivo, y la detracción de miles de gramos de sustancia e diferentes operaciones realizadas en Madrid, Puebla de Almuradiel (Toledo) y Valencia.
La segunda fase comienza con la llegada a la unidad del comandante Pindado, en diciembre de 1990, bajo la jefatura del coronel Garabito. Garzón acusa al comandante de concertar, a través de los confidentes, la importación de numerosos alijos de cocaína desde Colombia.
Los encargos motivaron la introducción en el mercado ilícito de 2.100 gramos de heroína y casi 17 kilos de cocaína "que en ningún caso hubieran ntrado si no es por la actuación de los funcionarios participantes en los diferentes hechos".
Según el juez, Pindado "dio carta de naturaleza" a un sistema de retribución habitual con droga a los colaboradores de la UCIFA, sirviéndose de la técnica de entrega controlada para "cubrir de legalidad" las operaciones y así poder detener a las personas a las que previamente habían inducido a traer las sustancias.
Ante la gravedad de los hechos encausados, el juez mantiene la prisión incondicional para indado, Méndez, Gómez Porras, Domínguez, los "hermanos Dalton" y Ramón de Temple, decreta prisión bajo fianza de dos millones para Quintero y de uno para Molina, López Segura y Ezquerecocha, y prisión sin fianza para Garrote y Cobos Moreno que se encuentran en paredero desconocido.
Ratifica también la libertad provisional de la que disfrutan en la actualidad el resto de los procesados y estima en 165 millones de pesetas la cuantía de las indemnizaciones que podrían fijarse en caso de derivarse responsbilidades pecunarias en la causa.
TODAS LAS OPERACIONES IRREGULARES DE LA UCIFA
-18 de enero de 1988. El teniente coronel Quintero investiga a los guardias de la comandancia de Pamplona Juan José Serón Rueda y Juan García Macías por tráfico de drogas. Al no dar resultado, ordena a sus subordinados que introduzacn cerca de 200 gramos de hachís en el vehículo y domicilio de los agentes, que fueron expedientados por estos hechos. Participaron el cabo Molina y los guardias Nieto, López Segura y Gómez Poras.
-15 de diciembre de 1988. El capitán Maquez ordena a Molina, Domínguez y López Segura que introduzcan de forma ilícita 140 gramos de heroína y un revólver en el domicilio en la calle Balandros de Madrid de Juan Antonio Carrasco, pequeño traficante que escapó de una persecución. El inmueble fue posteriormente registrado por orden judicial y el traficante fue condenado a 5 años de prisión.
-1 de marzo de 1989. El capitán Márquez, los cabos Molina y Cifuentes y Juan Carlos Vega ocultan el hallago de 400 gramos de cocaína en el domicilio, en la calle Cochabamba de Madrid, de la traficante Ana María Rodríguez Parfay, confidente de la policía, y deja escapar al traficante Julio César.
-20 de abril de 1989. El cabo Molina y los guardias Márquez, Domínguez, López Segura y Vega se apoderan de 2.200 gramos de cocaína y 2 pistolas en un registro en la calle Granada de Madrid sin hacerlo constar en el acta de entrada para quedarse con la sustancia.
-14 de noviembre de 1989. El teniente coronel uintero planea una entrega controlada junto a un confidente de la GIFA de Valencia al que pagan, sin especificarlo en el atestado, con los dos kilos de heroína intervenidos a un traficante "motivando la introducción en el mercado del tráfico ilícito de esta sustancia". Intervienen en la operación el capitán Márquez y los guardias Alcoba, Gómez Porras y Ortega.
-4 de mayo de 1990. Gómez Porras, por orden de Quintero, separa 5 kilos de cocaína de un alijo de 30 kilos incautados por la UCIFA en un hotel e Lloret de Mar (Gerona). Luego, paga con un kilo de sustancia a los "hermanos Dalton", que habían preparado la operación desde Bolivia.
-29 de septiembre de 1990. Gómez Porras, en presencia de Cifuentes y Montoya y con conocimiento del sargento Méndez y de Quintero, paga a los confidentes Ezquerecocha y de Temple con 100 gramos de heroína procedentes de un alijo de 2.100 gramos incautado en Puebla de Almuradiel (Toledo). Ezquerecocha vendió la sustancia al traficante Garrote Gago por 80.000 pesetas. -Diciembre de 1990. El comandante Pindado prepara con los "hermanos Dalton" una entrega controlada de 93 kilos de cocaína importada desde Colombia por la que extiende un cheque de 120 millones de pesetas. Autoriza la entrada de 10 kilos que entraron en el mercado y guarda para sí un kilo de sustancia. Participaron en la operación Gómez Porras, Domínguez, el sargento Méndez y el cabo Molina. Los confidentes cobraron 10 kilos de droga, dos de ellos procedentes del alijo de Lloret de Mar que vendieron portres millones de pesetas a Garrote, a través de Temple, Fernández Barbudo y Pallol. No hubo detenciones.
-Marzo de 1991. Pindado planea con de Temple y Ezquerecocha una nueva entrada de 10 kilos de cocaína desde Colombia, que fue entregada en el hotel Liebany de Madrid. Dos kilos fueron entregados a los confidentes para introducirlos en el mercado y otros 500 gramos fueron aportados como pago a confidentes. Participaron Gómez Porras y Domínguez.
-Abril de 1991. El comandante Pindado organiza la etrega controlada de 30 kilos de cocaína desde Colombia con de Temple, que percibe 3 kilos por esta operación con conocimiento del capitán Núñez y el sargento Ménedez. La droga fue desviada al tráfico de estupefacientes con la intervención de Gómez Porras y Domínguez, que cobraron 4 de los 10 millones obtenido en la venta.
-5 de junio de 1991. El guardia Domínguez es detenido por el propio comandante Pindado, después de que el coronel Ayuso le encargara investigar las irregularidades detectadas en las peraciones descritas. Pindado falseó con el capitán Núñez el expediente incoado y Domínguez fue puesto en libertad.
-19 de marzo de 1990. Quintero organiza con un confidente conocido como "Andreu" una operación en Sevilla con 3 kilos de heroína en la que intervienen el cabo Cifuentes y Juan Carlos Vega. La operación no se llegó a realizar y el jefe del grupo antidroga de Sevilla, el capitán David Cordero, falsea el atestado indicando que la droga había sido descubierta en la nacional IV con el fin de ar salida legal a la sustancia y encubrir al colaborador.
(SERVIMEDIA)
16 Feb 1993
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