Tras el estudio, Urra considera que el "tamagotchi" no engancha y que es un juguete como otro cualquiera. A su juicio, la mascota tiene de positivo que "intenta ensalzar los valores humanos: el cuidado, el afecto o el cariño. Mucho más positivo que esos otros juegos que para gnar tienes que matar".

El Defensor del Menor añadió que el juguete "no es competitivo sino todo lo contrario e intenta fomentar la parte sensible del ser humano. Además, tiene de bueno que si se 'muere' vuelve a 'vivir', por lo que no trauma al niño".

Sin embargo, Urra aclaró que tiene de "peligroso" la hipotética adicción en escasísimos niños porque "yo creo que hay que tener una edad para entenderlo bien".

A su juicio, sería un juego aconsejable a partir de los siete años, sobre todo por l capacidad de abstracción, y porque esta edad es clave para que se forme la personalidad de un niño. Antes de esa edad podría crear adicción, ya que los más pequeños no sabrían distinguir que finalmente el "tamagotchi" es una máquina.

AISLAMIENTO

El defensor del Menor añadió que "para un niño que tenga ciertas dificultades, que sea un poco "límite", no es recomendable porque a lo mejor se engancha mucho como a cualquier otro objeto y se aisla". Sin embargo, aclaró que tiene que ser un niño con unas aracterísticas muy especiales, no un niño normal.

Además, Urra subrayó que lo que no se puede decir es que un niño con este juguete aprende a querer, "porque para enseñar a un niño a querer a los demás tiene que aprender a querer a los seres vivos: los animales, las plantas, ... y el que le rodea, esto es lo interactivo de verdad".

Destacó como otro aspecto positivo de esta mascota que pone de relieve el sentimiento de desamparo. "Este tipo de juguetito no se muere o sufre por un maltrato, sólo s un niño lo estrella contra la pared. Pero, desaparece 'su vida' por el desamparo, si el niño no lo atiende languidece, y eso es muy importante porque la realidad social es la misma".

"Hablamos siempre del maltrato a la infancia y nos olvidamos de lo que es el desamparo la falta de atención a muchas cosas", precisó Urra.

La multinacional japonesa Bandai ha vendido ya 30.000 unidades de la mascota virtual "tamagotchi" desde que salió al mercado el pasado, 24 de mayo, según informaron ayer a Servimdia fuentes de la empresa.En España, cuesta unas 3.000 pesetas y está teniendo el mismo éxito que en Japón, EEUU y Gran Bretaña.